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CIENCIAS DE LA SALUD
REDIELUZ
ISSN 2244-7334 / Depósito legal pp201102ZU3769
Vol. 14 N° 1 • Enero - Junio 2024: 45 - 54
CONSUMO DE ALIMENTOS EN NIÑOS Y ADOLESCENTES CON SÍNDROME
METABÓLICO
Food Consumption In Children And Adolescents With Metabolic Syndrome
Luisandra González Inciarte1,1, Aida Souki Rincón1,2,, Doris García Camacho1,3, Gabriel
Ruiz2.4, Mariasanta Anzola Díaz1,5, Isabel Zubillaga Castillo1,6
1 Escuela Nutrición y Dietética. Facultad de Medicina. Universidad del Zulia (LUZ). Maracaibo, Venezuela
2 Centro de Investigaciones Endocrino Metabólicas Dr. Félix Gómez. Facultad de Medicina. Universidad del Zulia
(LUZ). Maracaibo, Venezuela
1https://orcid.org/0000-0002-7224-8326, ,2https://orcid.org/0000-0002-4929-8800, 3https://orcid.org/0000-0002-
5683-2186, 4https://orcid.org/0000-0001-8815-4423, 5https://orcid.org/0000-0001-5048-9754, 6https://orcid.
org/0000-0002-5741-3346,
luisandragonzalez@gmail.com,
RESUMEN
El Síndrome metabólico (SM), aumenta
el riesgo para la enfermedad cardiovascular,
principal causa de muerte prematura a ni-
vel mundial, considerando importante iniciar
la prevención desde tempranas etapas de la
vida. El objetivo de la presente investigación
descriptiva, de campo, con diseño no experi-
mental/transversal, fue evaluar el consumo de
alimentos en niños y adolescentes con SM, en
una muestra intencional de 138 sujetos (6-17
años) divididos en dos grupos (sin y con SM).
A todos se les realizó una evaluación integral
valorándose parámetros clínicos, antropomé-
tricos, bioquímicos y dietéticos. Para el aná-
lisis estadístico se utilizó el programa SPSS,
versión 22 para Windows, se aplicó la prueba
t-student para muestras independientes y la de
correlación de Pearson (p<0,05). Los resulta-
dos mostraron que el 47,8% de los sujetos con
SM presentó un porcentaje de adecuación alto
para proteínas (131,7%) y grasas (119,0%);
normal para calorías (104,4%), y carbohidratos
(97,2%), pero muy bajo para bra (60,9%). No
se evidenció diferencia estadísticamente signi-
cativa en el consumo de nutrientes entre am-
bos grupos. En el grupo con SM, se observó
correlación estadísticamente signicativa entre
el consumo de energía y macronutrientes y las
variables circunferencia de cintura, triacilglicé-
ridos y las tensiones arteriales, mientras que
la bra se relacionó solamente con la glucemia
basal. En conclusión, los resultados sugieren
una asociación entre el consumo de calorías,
proteínas, grasas y bra con los criterios diag-
nósticos para el SM.
Palabras clave: macronutrientes, bra, sín-
drome metabólico, circunferencia de cintura,
triacilglicéridos, presión arterial.
ABSTRACT
Metabolic syndrome (MS) increases the risk of
cardiovascular disease, the leading cause of pre-
mature death worldwide, and it is important to ini-
tiate prevention from early stages of life. The aim
of the present descriptive eld study, with a non-ex-
perimental/cross-sectional design, was to evalua-
te food consumption in children and adolescents
with MS in a purposive sample of 138 subjects (6-
17 years old) divided into two groups (without and
with MS). All of them underwent a comprehensive
evaluation, assessing clinical, anthropometric, bio-
chemical and dietary parameters. For the statistical
analysis we used the SPSS program, version 22 for
Windows, the Student’s t-test for independent sam-
ples and Pearson’s correlation test (p<0.05). The
results showed that 47.8% of the subjects with MS
presented a high percentage of adequacy for pro-
tein (131.7%) and fat (119.0%); normal for calories
(104.4%), and carbohydrates (97.2%), but very low
for ber (60.9%). There was no statistically signi-
cant di󰀨erence in nutrient intake between the two
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groups. In the group with MS, a statistically signi-
cant correlation was observed between energy and
macronutrient intake and the variables waist cir-
cumference, triacylglycerides and blood pressure,
while ber was only related to basal glycemia. In
conclusion, the results suggest an association be-
tween calorie, protein, fat and ber intake with the
diagnostic criteria for MS.
Key words: consumption, metabolic syndrome,
waist circumference, triacylglycerides, blood pres-
sure, ber.
Recibido: 26-02-2024 Aceptado: 07-03-2024
INTRODUCCIÓN
La dieta, juega un papel importante, como uno
de los constituyentes principales de un estilo de
vida; se cree que el vínculo entre los diferentes
componentes de la dieta, incluida la energía, los
macro y micronutrientes, con la obesidad se deri-
va de interacciones entre los genes y el medio am-
biente, y se establece por un desequilibrio entre la
ingesta energética (inadecuados hábitos alimenta-
rios) y el gasto energético (sedentarismo), antece-
dentes familiares, y condiciones socioeconómicas
(Jiayi & Suijian, 2015). Por esta razón, la obesidad
infantil es considerada un fenómeno multifactorial;
además, se ha planteado que en los jóvenes, la die-
ta y la falta de actividad física son las causas más
importantes del sobrepeso y la obesidad. (Velas-
co-Estrada et al., 2018).
Es importante resaltar que en la infancia co-
mienzan a formarse hábitos alimentarios que se
consolidarán y mantendrán en la edad adulta, las
prácticas apropiadas son clave, para prevenir en-
fermedades crónicas no trasmisibles, como la in-
sulino-resistencia, diabetes mellitus, hipertensión
arterial, dislipidemias, obesidad y algunos tipos de
cáncer; todas relacionados con el consumo inade-
cuado de alimentos que pueden afectar la salud y el
bienestar de todos los miembros del hogar (Chacín
et al., 2019, Ochoa & Berge, 2017).
Desde que se publicaron estudios cientícos
sobre el Síndrome metabólico (SM), se ha puesto
atención en la disminución de la edad de su mani-
festación, pasando el grupo de riesgo de mayores
de 50 años a 35 años, lo que se puede atribuir a
cambios en el estilo de vida desde una edad tem-
prana, basados en inadecuados hábitos alimenta-
rios y a la falta de actividad física (Lizarzaburu R.,
2013). Innumerables investigaciones publicadas
sobre SM evidencian su importancia, tanto clínica
como epidemiológica, ya que duplica el riesgo de
enfermedad cardiovascular e incrementa el riesgo
de diabetes tipo 2 (Quintero et al., 2018, Aguilar et
al., 2015). En base a lo anteriormente descrito, el
objetivo de este estudio fue evaluar el consumo de
alimentos de niños y adolescentes con SM, con la
nalidad de establecer la asociación entre el con-
sumo de nutrientes y los criterios utilizados para el
diagnóstico del síndrome.
METODOLOGÍA
Población y muestra
La presente investigación fue descriptiva
y correlacional, de campo; no experimental y
de diseño transversal. La población de estudio
estuvo conformada por niños y adolescentes
escolarizados, del Municipio Maracaibo del Es-
tado Zulia, que asistieron a Jornadas de Aten-
ción Integral donde se evaluaron los factores
endocrino-metabólicos involucrados en el ries-
go de aterosclerosis, realizadas por el Centro
de Investigaciones Endocrino-Metabólicas “Dr.
Félix Gómez” (CIEM), de la Facultad de Me-
dicina, Universidad Zulia, Estado Zulia, Vene-
zuela en los años 2010-2016; cumpliendo con
los acuerdos de bioética y bioseguridad de la
declaración de Helsinki (AMM, 2015).
La población estuvo conformada por 1046
niños y adolescentes, con edades comprendi-
das entre 6 y 17 años. La muestra constituida
por 138 sujetos, fue seleccionada a través de
un muestreo no probabilístico intencional, uti-
lizando los siguientes criterios de inclusión: a)
Sujetos de ambos géneros, b) Escolarizados,
c) Firma de un ¨consentimiento informado¨ por
los padres o representante legal, d) Niños y
adolescentes sanos (sin diabetes, ovarios po-
liquísticos, hipertensión arterial, enfermedad
renal u otras patologías asociadas o el uso de
medicamentos para su tratamiento), e) Con
toda la información solicitada en las encuestas
de consumo y hábitos alimentarios.
Técnicas para la recolección de datos
A todos los sujetos que formaron parte de la
muestra, se les realizó una evaluación integral que
incluyó parámetros clínicos, bioquímicos, antro-
pométricos, y dietéticos. La evaluación clínica fue
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realizada por un Médico Pediatra, el cual realizó el
examen físico de rutina y toma de la presión arte-
rial, utilizando un esgmomanómetro de mercurio
para tal n, los pacientes estuvieron previamente
sentados y en reposo.
La evaluación antropométrica realizada por un
Nutricionista, consistió en la medición de la circun-
ferencia de cintura (CC), el peso corporal y talla;
según las técnicas de cineantropometría estándar
establecidas para cada medida, (Garcia-Avendaño
& Perez, 2002, Vargas et al., 2011). A través de es-
tas medidas se obtuvo el IMC, mediante la fórmula
de Quetelec [Peso/ (talla)2]; el cual se gracó utili-
zando las tablas de crecimiento infantil de la Orga-
nización Mundial de la Salud (OMS) según edad y
género (OMS, 2007).
Para la evaluación bioquímica, previo ayuno de
12 horas, se le extrajo a cada sujeto una muestra
de sangre venosa (10cc), a n de determinar los
siguientes parámetros bioquímicos: Glucemia ba-
sal (GliB, mg/dL), Triacilglicéridos (TAG, mg/dL),
Colesterol Total (CT, mg/dL), Colesterol asociado a
lipoproteínas de alta densidad (HDL-c, mg/dL), áci-
do úrico (AU, mg/dL) y Colesterol asociado a lipo-
proteínas de baja densidad (LDL-c, mg/dL); obteni-
dos mediante métodos enzimáticos colorimétricos
(Human Gesellschaft für Biochemica und Diagnos-
tica mbh), excepto, la LDL-c que fue calculada me-
diante la fórmula de Friedewald, (Friedewald et al.,
1972). Todas las muestras fueron procesadas en el
Laboratorio Clínico del Centro de Investigaciones
Endocrino-Metabólicas “Dr. Félix Gómez”.
La evaluación dietética se llevó a cabo median-
te la aplicación de la técnica del Recordatorio de
24 Horas, recopilando la información en un formu-
lario estructurado, detallando todos los alimentos y
bebidas consumidas el día anterior a la entrevista
(Hernández et al., 2021). La estandarización de las
raciones de alimentos se realizó utilizando medidas
prácticas (tazas, cucharas, vasos); para el cálculo
del consumo de calorías diarias y macronutrientes
totales (proteínas, grasas, carbohidratos y bra)
(INN, 2012); posteriormente, con los datos del con-
sumo, se estimó el porcentaje de adecuación, en
base a la formula siguiente: [(Nutriente-consumido/
Nutriente-requerido)*100]; los requerimientos nutri-
cionales normales para edad y género usados fue-
ron los publicados por el Instituto Nacional de Nu-
trición (INN, 2018); estableciéndose como estándar
los siguientes categorías: Bajo consumo <90, Con-
sumo adecuado (normal) 90-110%, Alto consumo
>110%. (Hernández et al., 2021)
Por otra parte, para el diagnóstico del SM se
utilizaron los criterios de Cook y col., (CC per-
centil 90, TAG ≥110 mg/dL,HDL-c ≤40 mg/dL, Pre-
sión arterial percentil 90%) y la GliB ≥99,9 mg/
dl, tomando en cuenta las recomendaciones de
la Asociación Americana de Diabetes (Agirbasli y
otros, 2016), En base a estos criterios, la muestra
de 138 niños y adolescentes quedo dividida en dos
grupos: a) 66 sujetos con diagnóstico de SM y b)
72 sujetos sin diagnóstico de SM. El diagnóstico de
la CC y presión arterial se realizó mediante las ta-
blas de percentiles de circunferencia de cintura en
niños y adolescentes del Municipio Maracaibo del
Estado Zulia (Vargas et al., 2011) y los percentiles
para edad y género en las grácas publicadas por
la Sociedad Venezolana de Puericultura y Pediatría
(SVPP, 1993).
Análisis estadístico. El análisis de los resultados
se realizó utilizando el Paquete Estadístico para
Ciencias Sociales (SPSS para Windows, versión
22, Inc. Chicago, IL, USA). Los resultados se ex-
presaron como frecuencias absolutas y relativas;
con medidas de tendencia central (media) y de dis-
persión (desviación estándar). Previa vericación
de la distribución normal de las variables mediante
la prueba de Kolmogorov-Smirnov, se compararon
los grupos con la prueba t-Student para muestras
independientes; la asociación entre las variables se
verico con la prueba de correlación de Pearson,
considerándose diferencias estadísticamente signi-
cativas tanto las diferencias como las asociacio-
nes a valores de p < 0,05.
RESULTADOS
La Tabla 1 corresponde a las características an-
tropométricas, bioquímicas y clínicas de los sujetos
evaluados agrupados según presencia o ausencia
del SM. Del total de la muestra, n=138, el 47,82%
fueron diagnosticados con SM, el restante 52,17%
sin SM; se puede observar que existen diferencias
estadísticamente signicativas entre ambos grupos,
en la mayoría de parámetros evaluados, exceptua-
do la edad, GliB, CT y LDL-c; presentando los su-
jetos con SM los valores más altos, a diferencia de
las HDL-c que fue superior en los sujetos sin SM.
El consumo, porcentaje de adecuación y
requerimientos de calorías y macronutrientes
según presencia o ausencia de SM se obser-
van en la Tabla 2; donde se muestra que no
existe diferencia estadísticamente signicativa
entre ambos grupos para las variables analiza-
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das. En el grupo general (todos los sujetos), el
porcentaje de aporte calórico (106±35,7 %) y el
de carbohidratos (98,2±34,9 %) es normal, es
alto en proteínas (136,6±63,4 %) y en grasas
(120,6±58 %), y muy bajo en bra (62,1±46,8
%); conservando una tendencia similar en el
grupo con y sin presencia de SM.
Al evaluar la relación entre los criterios de
SM y el consumo de calorías y macronutrien-
tes del grupo total de sujetos (Tabla 3), se en-
contró que existe una correlación estadística-
mente signicativa entre las calorías y los TAG,
así como, con las tensiones arteriales (TAS y
TAD); e igual forma, las proteínas y las grasas
tuvieron en común una asociación estadística-
mente signicativa con las variables CC, TAG y
TAS, y adicionalmente las grasas con la TAD;
por otra parte los carbohidratos se asociaron
con TAS y la bra dietética, se relacionó con la
glucemia basal.
En Tabla 4 se muestra la relación entre los
criterios diagnósticos del SM, el consumo ca-
lórico y de macronutrientes del grupo sin SM,
donde solamente se observan correlación es-
tadísticamente signicativa entre el consumo
de proteínas y de carbohidratos con la TAS.
Por otra parte, en los sujetos con SM (Tabla 5),
se encontró una asociación estadísticamente
signicativa entre calorías, proteínas y grasas
con la CC y los TAG; adicionalmente las proteí-
nas y grasas con la TAS y las calorías y grasas
con la TAD. La bra únicamente se asoció con
la glucemia basal.
Tabla 1. Características Antropométricas, Bioquímicas y Clínicas de los sujetos evalua-
dos según la presencia/ausencia del SM
Variables
Todos
(n=138)
Sin SM
(n=72)
Con SM
(n=66)
Media ± DS Media ± DS Media ± DS p
Edad (años) 11,5 ± 3,1 11,5 ± 3,5 11,5 ± 2,6 1,000
Peso (gr) 55,2 ± 23,6 43,0 ± 16,5 68,4 ± 23,2 0,000
Talla (m) 1,5 ± 0,2 1,4 ± 0,2 1,5 ± 0,1 0,007
IMC 24,6 ± 7,1 20,2 ± 5,0 29,4 ± 5,9 0,000
CC (cm) 81,6 ± 18,3 69,8 ± 13,3 94,4 ± 13,8 0,000
GliB (mg/dl) 98,6 ± 108,8 94,2 ± 90,7 103,5 ± 126,2 0,618
TAG (mg/dl) 128,7 ± 82,7 81,1 ± 46,5 180,7 ± 82,4 0,000
HDL-c (mg/dl) 39,7 ± 11,2 45,7 ± 11,5 33,1 ± 6,2 0,000
CT (mg/dl) 159,8 ± 32,6 157,8 ± 35,7 161,9 ± 29,1 0,469
LDL-c (mg/dl) 94,2 ± 28,3 95,9 ± 27,5 92,3 ± 29,2 0,453
A. Úrico (mg/dl) 4,4 ± 1,5 3,8 ± 0,9 5,1 ± 1,7 0,000
TAS (mm de Hg 101,1 ± 15,0 96,2 ± 13,2 106,4 ± 15,1 0,000
TAD (mm de Hg) 66,1 ± 11,4 62,4 ± 9,2 70,2 ± 12,2 0,000
Resultados expresados como media ± Desviación estándar (DS). SM= Síndrome Metabólico; IMC= Índice de masa corporal; CC= Circunfe-
rencia de cintura; GliB= Glucemia basal; TAG=Triacilglicéridos; HDL-c= Colesterol unido a las lipoproteínas de alta densidad; CT= Colesterol
total; LDL-c= Colesterol unido a las lipoproteínas de baja densidad; A. Úrico= Ácido Úrico; TAS= Tensión arterial sistólica; TAD= Tensión arterial
diastólica. p= signicancia estadística (p<0,05) vericada mediante la prueba t-Student para muestras independientes
Fuente: González et al., (2022).
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Tabla 2. Consumo, porcentaje de adecuación y requerimientos de calorías
y macronutrientes según la presencia/ausencia del SM
Variables Todos
(n=138) Sin SM (n=72) Con SM
(n=66) p
Media±DS Media±DS Media±DS
Consumo 2228,5±15,6 2205,3±681,4 2253,9±755,6 0,692
Calorías Requerimiento 2155,8±411,3 2143,7±451,6 2169,0±365,4 0,719
% Adecuación 106,0±35,7 107,4±39,8 104,4±30,9 0.622
Consumo 71,8±26,6 71,6±29,1 72,2±23,8 0,894
Proteínas Requerimiento 60,8±29,0 58,3±27,6 63,4±30,4 0,305
% Adecuación 136,6±63,4 141,1±68,5 131,7±57,4 0,389
Consumo 99,5±48,3 97,9±46,1 101,2±51,0 0,695
Grasas Requerimiento 83,8±15,7 83,4±17,4 84,2±13,7 0,781
% Adecuación 120,6±58,0 122,2±62,5 119,0±53,1 0,747
Consumo 276,8±91,2 277,7±84,7 275,7±98,4 0,899
Carbohidratos Requerimiento 289,7±56,1 291,0±60,6 288,3±51,2 0,775
% Adecuación 98,2±34,9 99,1±35,1 97,2±34,9 0,759
Consumo 10,1±7,7 10,1±7,1 10,0±8,4 0,973
Fibra Requerimiento 16,5±3,1 16,5±3,5 16,5±2,6 1,000
% Adecuación 62,1±46,8 63,2±46,9 60,9±47,1 0,774
Resultados expresados como media ± Desviación estándar (DS). SM= Síndrome metabólico. p= signicancia estadística (p<0,05) vericada
mediante la prueba t-Student para muestras independientes.
Fuente: González et al., (2022)
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Tabla 3 Relación entre los criterios para SM y el consumo de calorías y macronutrientes de todos los suje-
tos evaluados con/sin SM
Criterios
Calorías Proteína Grasa CHO Fibra
r p r p r p r p r p
CC (cm) 0,164 0,055 0,188 0,027 0,189 0,027 0,052 0,546 0,039 0,648
GliB (mg/dl) -0,027 0,249 -0,0018 0,237 0,053 0,535 0,014 0,873 0,192 0,024
TAG (mg/dl) 0,214 0,012 0,209 0,014 0,215 0,012 0,083 0,331 0,065 0,446
HDL-c (mg/dl) 0,051 0,552 -0,015 0,861 0,040 0,644 0,077 0,369 0,047 0,951
TAS (mm de Hg) 0,225 0,008 0,285 0,001 0,192 0,024 0,180 0,024 0,021 0,808
TAD (mm de Hg) 0,029 0,014 0,137 0,108 0,220 0,009 0,147 0,086 0,141 0,637
n= 138. CHO= Carbohidratos. CC= Circunferencia de cintura; GliB= Glucemia basal; TAG= Triacilglicéridos; HDL-c= Colesterol unido a las
lipoproteínas de alta densidad; TAS= Tensión arterial sistólica; TAD= Tensión arterial diastólica. r= Coeciente de correlación de Pearson p=
Signicancia estadística a valores de p<0,05, mediante la prueba de correlación de Pearson.
Fuente: González et al., (2022)
Tabla 4. Relación entre los criterios para SM y el consumo de calorías y macronutrientes de los sujetos
evaluados sin SM
Criterios Calorías Proteína Grasa CHO Fibra
r p r p r p r p r p
CC (cm) 0,093 0,438 0,169 0,155 0,065 0,586 0,093 0,438 0,090 0,454
GliB (mg/dl) 0,070 0,559 0,059 0,625 -0,025 0,836 0,116 0,331 -0,020 0,865
TAG (mg/dl) 0,227 0,055 0,107 0,369 0,221 0,063 0,131 0,272 -0,027 0,821
HDL-c (mg/dl) 0,133 0,266 -0,006 0,958 0,122 0.308 0,116 0,332 0,068 0,573
TAS (mm de Hg) 0,213 0,073 0,314 0,007 0,087 0,467 0,277 0,019 0,049 0,680
TAD (mm de Hg) 0,152 0,203 0,121 0,312 0,088 0,463 0,170 0,153 -0,085 0,479
n= 72. CHO= Carbohidratos. CC= Circunferencia de cintura; GliB= Glucemia basal; TAG= Triacilglicéridos; HDL-c= Colesterol unido a las lipo-
proteínas de alta densidad; TAS= Tensión arterial sistólica; TAD= Tensión arterial diastólica. r= Coeciente de correlación de Pearson p= Signi-
cancia estadística a valores de p<0,05, mediante la prueba de correlación de Pearson.
Fuente: González et al., (2022)
51
Tabla 5. Relación entre los criterios para SM y el consumo de calorías y macronutrientes de los sujetos
evaluados con SM
Criterios Calorías Proteína Grasa CHO Fibra
r p r p r p r p r p
CC (cm) 0,284 0,021 0,346 0,005 0,377 0,002 0,069 0,583 0,026 0,838
GliB (mg/dl) -0,099 0,423 -0,093 0,456 -0,077 0,541 -0,055 0,663 0,334 0,006
TAG (mg/dl) 0,262 0,034 0,397 0,001 0,267 0,031 0,106 0,395 0,145 0,245
HDL-c (mg/dl) 0,011 0,927 -0,022 0,863 -0,011 0,929 0,049 0,695 0,041 0,0745
TAS (mm de Hg) 0,239 0,053 0,291 0,018 0,282 0,022 0,129 0,301 0,153 0,219
TAD (mm de Hg) 0,255 0,039 0,172 0,168 0,324 0,008 0,002 0,987 0,135 0,279
n= 66. CHO= Carbohidratos. CC= Circunferencia de cintura; GliB= Glucemia basal; TAG= Triacilglicéridos; HDL-c= Coleste-
rol unido a las lipoproteínas de alta densidad; TAS= Tensión arterial sistólica; TAD= Tensión arterial diastólica. r= Coeciente
de correlación de Pearson p= Signicancia estadística a valores de p<0,05, mediante la prueba de correlación de Pearson.
Fuente: González et al., (2022)
DISCUSIÓN
Entre los resultados más relevantes de la in-
vestigación se pueden mencionar a) el consu-
mo de calorías y macronutrientes de los sujetos
sin SM y con SM no fue estadísticamente dife-
rente y b) la asociación estadísticamente signi-
cativa entre los criterios diagnósticos para SM
con el consumo de calorías y macronutrientes
fue más evidente en el grupo de sujetos con
SM. De igual manera, también se observaron
diferencias al comparar las características an-
tropométricas, bioquímicas y clínicas entre
ambos grupos como fue el caso de: CC, TAG,
HDL-c, TAS y TAD.
Al comparar estos resultados con otras pu-
blicaciones, observamos semejanzas en la al-
teración de los componentes de SM, donde los
de mayor frecuencia fueron: CC, TAG y HDL-c.
(Souki et al., 2018), de igual forma, Pierlot et al
en su articulo de revision realizado en 12 paí-
ses del continente americano, reporta que los
componentes del SM más prevalentes fueron
la obesidad y las dislipidemias, mientras que
los menos prevalentes fueron hiperglicemia e
hipertensión (Pierlot et al., 2017). Por otra par-
te, Agüero et al, mostraron resultados simila-
res, a pesar de utilizar diferentes criterios diag-
nósticos como fueron los de la IDF, INCEP-ATP
II, y De Ferranti, en una muestra de niños y
adolescente paraguayos. (Agüero et al., 2021).
Los análisis de adecuación de macronutrientes,
como las proteínas y las grasa) reejan similitudes
con los resultados publicados por Drozdz et al., y Lo-
t et. al, quienes indican que la dieta alta en grasas
y la ingesta baja o alta en proteínas pueden condu-
cir a respuestas epigenéticas asociadas a enferme-
dades metabólicas (diabetes tipo 2, enfermedades
cardiovasculares, obesidad e hipertensión arterial)
(Drozdz et al., 2021, Lot et al., 2022). Asimismo,
la ingesta elevada de proteínas tiene efecto nutri-
genómico aumentando el riesgo de prediabetes y
diabetes mellitus tipo 2; sin embargo, no solamen-
te es importante considerar la cantidad consumida
sino también la fuente de estas proteínas, ya que el
consumo alto de proteína animal se relaciona con
aumento de la prevalencia de SM, por el contrario
las de origen vegetal se asocia con disminución del
mismo (Lot et al., 2022).
Las dietas basadas en elecciones alimentarias
con mayor adherencia a patrones dietéticos ca-
racterizados por el consumo de alimentos ricos
en sodio, grasa saturadas e insaturadas del tipo
trans, carbohidratos renados y pobres en bras se
52
asocian con un aumento de la presión arterial y la
adiposidad corporal en adolescentes (Neves et al.,
2021). Sin embargo, hay investigaciones limitadas
sobre la asociación entre el consumo de proteí-
nas y la presión arterial en pediatría, y la eviden-
cia publicada puede corresponder más al consumo
de grupos especícos de alimentos, como frutas,
verduras, legumbres y jugos de frutas (Damas-
ceno et al., 2011), que están relacionados con la
prevención de la obesidad, enfermedades cardio-
vasculares e hipertensión arterial; pero aún no se
conoce sucientemente en niños y adolescentes,
(Lot et al., 2022). Se sugiere que la asociación con
el consumo de bebidas azucaradas contribuye con
el desarrollo de la patogénesis de la hipertensión
relacionado a su vez con el ácido úrico que puede
elevar la presión sanguínea por el aumento de la
inamación renal, activando el sistema renina-an-
giotensina y disminuyendo la producción de óxido
nítrico (Neves et al., 2021, Nguyen et al., 2009)
La ingesta calórica alta y el mayor consumo de
carbohidratos en los adolescentes se asocian con
el aumento de los triacilglicéridos y disminución de
los niveles séricos de HDL-c, que son factores im-
plicados en el SM (Pierlot et al., 2017), A su vez, la
evidencia aportada por numerosas investigaciones
demuestra, que la adiposidad visceral se relaciona
de manera independiente con cada uno de los cri-
terios de SM (Pereira R et al., 2016), por lo tanto, la
predisposición genética, la falta de actividad física
y una dieta baja en bra con alto contenido de gra-
sas, que contribuyen al acumulo del tejido adiposo
en la región visceral, deben ser considerados como
factores de riesgo para el SM (Delfante, 2012). El
aumento desordenado de las células adiposas pro-
duce activación e inltración de macrófagos, libera-
ción de citocinas pro-inamatorias, incremento en
el número de receptores β-3 adrenérgicos los cua-
les tienen una menor sensibilidad a la señal anti-li-
política de la insulina en los adipocitos viscerales,
lo que se traduce en la liberación de grandes can-
tidades de ácidos grasos y lipotoxicidad, afectando
tejidos como el páncreas, (Cho, 2023, Bermudez &
Velasquez, 2014).
En el grupo con SM, y el general, presentaron
una correlación estadísticamente signicativa entre
la bra y la glucemia basal, a pesar que el consumo
de carbohidratos no fue alto; esto podría estar re-
lacionado con diversos factores existentes capaces
de alterar el índice glucémico de los alimentos, tal
como lo son, el tamaño de las partículas, la com-
posición del alimento en su relación amilosa-ami-
lopectina, los diferentes métodos de preparación
(los tiempos de cocción prolongados), provocando
la gelatinización del almidón cuando se somete el
alimento a temperaturas mayores a 60°C, de mane-
ra que la relación del aumento de calor y el tiempo
de cocción, provoca aumento del índice glucémico
(Reynolds et al., 2020, Koll, 2012).
A este respecto Souki et al., observaron que
el consumo de bra dietética está inversamente
asociado con el estado nutricional antropométrico
y con los componentes del Síndrome Metabólico
como la CC, PAS y glucemia basal (en niños y ado-
lescentes, de ambos géneros, 10-17 años); similar
a nuestro estudio el autor no reportó diferencias
estadísticamente signicativas en el consumo de -
bra y las mediciones de CC y PAS entre los grupos
estudiados, exceptuando la glucemia basal (Souki
et al., 2018). La literatura publicada, menciona con
frecuencia la relación entre el consumo de bra con
la prevención del SM, ella es capaz de reducir el
colesterol total, presiones arteriales y resistencia a
la insulina, sobre todo si la ingesta es más alta en
bra soluble (20 g/1000 kcal) acompañada con gra-
sas poliinsaturadas y carbohidratos de índice glu-
cémico bajo. (Fulgoni et al., 2020, Velázquez-López
et al., 2014, Edwards et al., 2015).
De esta manera luego de analizar los resultados
obtenidos se evidencia que el consumo inadecuado
de alimentos está presente en niños y adolescen-
tes con o sin diagnóstico de SM. Sin embargo, se
presentan más correlaciones entre el consumo de
calorías, proteínas, grasas y bra con los criterios
diagnósticos de CC, TAG, tensiones arteriales y
glucemia en la población con SM.
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