Revista de Ciencias Sociales (RCS)

Vol. XXXI, No. 4, Octubre - Diciembre 2025. pp. 396-410

FCES - LUZ ● ISSN: 1315-9518 ● ISSN-E: 2477-9431

Como citar: Villacis, L. M., Zambrano, K. G., Delgado, S. A., y Robles, A. L. (2025). Narconovelas y programas agresivos que inciden en la conducta y decisiones en universitarios ecuatorianos. Revista De Ciencias Sociales, XXXI(4), 396-410.

Narconovelas y programas agresivos que inciden en la conducta y decisiones en universitarios ecuatorianos

Villacis Zambrano, Lilia Moncerrate*

Zambrano Alcívar, Katty Gisella**

Delgado Robles, Sebastián Andrés***

Robles Altamirano, Adriana Lourdes****

Resumen

En los últimos años, los medios de comunicación han adquirido un papel determinante en la formación de criterios y comportamientos en los adolescentes. En particular, las narconovelas y los programas con alto contenido violento se han popularizado, generando preocupación por su posible influencia en la toma de decisiones y en la conducta de los jóvenes. El objetivo de la investigación fue demostrar cómo las narconovelas y los programas con contenido agresivo inciden en la conducta de los adolescentes y en su toma de decisiones. Se utilizó un enfoque mixto, combinando métodos cuantitativos y cualitativos, utilizando el método Delphi con expertos y una encuesta dirigida a 109 estudiantes de diversas carreras en la Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí-Ecuador. Como resultado se confirmó que la exposición continua a narconovelas y programas violentos influye en el comportamiento de los jóvenes, quienes tienden a asociar la violencia con la realidad cotidiana. Esto se refleja en conductas como vinculación a grupos carentes de valores, abandono de la universidad por trabajos que ofrecen dinero fácil y falta de valoración de la formación académica como camino hacia un empleo digno a largo plazo. Además, se observó desmotivación en el aprendizaje, deserción estudiantil y problemas psicológicos.

Palabras clave: Narconovelas; programas; agresividad; conducta; violencia.

* Doctora en Ciencias Administrativas. Postdoctora en Sistematización Educativa. Postdoctora en Educación, Tecnología e Investigación. Postdoctora en Estrategias Didácticas para la Investigación. Magister en Desarrollo de la Inteligencia. Licenciada en Administración y Supervisión Educativa. Docente Investigadora en la Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí, Extensión Bahía de Caráquez, Costa, Ecuador. E-mail: lilia.villacis@uleam.edu.ec ORCID: https://orcid.org/0000-0002-2888-6363

** Doctora en Ciencias Administrativas. Magíster en Gerencia de Proyectos Educativos y Sociales. Magíster en Educación y Desarrollo Social. Diploma en Liderazgo Educativo. Técnica de Pedagogía en Informática. Docente en la Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí (ULEAM) Extensión Chone, Chone, Manabí, Ecuador. E-mail: katty.zambrano@uleam.edu.ec ORCID: https://orcid.org/0000-0001-8714-1401

*** Maestrante en Neuropsicología del Aprendizaje en la Universidad Casa Grande, Guayaquil, Ecuador. Licenciado en Psicología Clínica. Trabaja en Salud y Bienestar. Investigador Independiente en Ecuador. E-mail: seb2001.sadr@gmail.com ORCID: https://orcid.org/0009-0002-9195-6237

**** Doctora en Ciencias de la Educación, Especialización en Historia y Geografía. Magister en Ciencias de la Educación, mención Educación Superior. Docente en la Universidad Estatal de Milagro (UNEMI), Milagros, Guayas, Ecuador. E-mail: aerbolesa@unemi.edu.ec ORCID: https://orcid.org/0000-0003-2610-7394

Recibido: 2025-06-26 • Aceptado: 2025-09-13

Narco-novelas and aggressive programs that influence the behavior and decisions of Ecuadorian university students

Abstract

In recent years, the media has acquired a decisive role in shaping adolescents’ opinions and behaviors. In particular, narco-novelas and programs with high levels of violence have become popular, generating concern about their potential influence on young people’s decision-making and behavior. The objective of this research was to demonstrate how narco-novelas and programs with aggressive content affect adolescent behavior and decision-making. A mixed-methods approach was used, combining quantitative and qualitative methods, employing the Delphi method with experts and a survey administered to 109 students from various majors at the Eloy Alfaro Lay University of Manabí, Ecuador. The results confirmed that continuous exposure to narco-novelas and violent programs influences the behavior of young people, who tend to associate violence with everyday reality. This is reflected in behaviors such as joining groups lacking values, dropping out of university for jobs that offer easy money, and a lack of appreciation for academic training as a path to decent long-term employment. In addition, a lack of motivation in learning, student dropout, and psychological problems were observed.

Keywords: Narco-novelas; programs; aggression; behavior; violence.

Introducción

En estos últimos años, se han intensificado a nivel televisivo las novelas agresivas y de carácter violento que están cargadas de negocios, de violencia, robos, asaltos, drogas y dando una experiencia de inseguridad que hoy se hace realidad en el país. Es triste escuchar a jóvenes, cuando se les pregunta qué carreras desean estudiar o en qué desean profesionalizarse, que digan: “Yo quiero ser narco”, porque es una de las opciones más lucrativas y fáciles. Estas conversaciones que se tienen en coloquios con los estudiantes de los colegios en las zonas rurales dejan al docente preocupado, por lo que se decidió plasmarlas en este artículo como base para investigar este problema que acarrea a muchos jóvenes de la provincia de Manabí en Ecuador.

Una gran preocupación ver cómo se han ido perdiendo los valores y las proyecciones futuras de la nueva sociedad, ubicando opciones que van en contra de la humanidad. Hoy se constata la gran influencia de las producciones latinoamericanas que proyectan hechos reales y que han captado mucha población joven; por esta razón se ve necesario profundizar e investigar cómo la visualización de estas narconovelas condiciona, transforma al adolescente hasta el punto de escoger este tipo de vida sin medir ni analizar las consecuencias de estas. Por esta razón, es menester que los nuevos formadores analicen la problemática dentro del contexto académico, para ir buscando nuevas formas metodológicas que vayan creando espacios de reflexión dentro y fuera de las aulas de clase.

Cabrera et al. (2024), en la investigación destacan el papel fundamental del docente, pues a través de sus experiencias permite transmitir conocimientos fundamentados en principios éticos y orientados a afianzar en los estudiantes habilidades de pensamiento, actitudes críticas y reflexivas.

Es de gran importancia destacar lo que los autores enfatizan en la formación de los jóvenes: Como docentes, el transmitir los valores y principios éticos desde la praxis; solo así se cambiaría la mentalidad que hoy se está desarrollando en la juventud desde lo cognitivo y afectivo, haciendo realidad lo que conoce, se hace y de lo que es a través de su entorno.

Por esta razón se ve necesario analizar cómo las narconovelas y los programas con contenido agresivo inciden en la conducta de los adolescentes y en la toma de decisiones, en el contexto del cambio sustantivo que está experimentando el país y que cada día se recrudece, dejando entrever la pérdida de valores; por ende, los referentes no tienen trascendencia en la juventud.

Para Orozco (2021), este tipo de perspectivas no tiene en cuenta factores políticos, económicos y sociales que puedan llevar a este tipo de problemáticas. Aspectos como el incremento poblacional, el desempleo y la consolidación de modelos políticos que generan el incremento de la precarización de las clases sociales más bajas no están en ese modelo explicativo de la televisión como influenciadora.

Se ve urgente buscar nuevos caminos que lleven a un análisis real de la situación, tomar decisiones a nivel global y desde la realidad de cada país; se debe cambiar la política, no de gobierno, sino de Estado, para un cambio profundo de estructura, que conlleve cambiar la economía del país, crear fuentes de trabajo justo y poner énfasis transformador en la educación, porque es uno de los pilares que ayudarán a cambiar el país.

Para los autores Pedraja-Rejas y Tovar-Correal (2024), la adquisición de conocimientos y habilidades destinadas al abordaje de la competencia intercultural permitirá dar respuesta a la diversidad del alumnado, contribuyendo a fomentar una interacción armónica en ambientes de diversidad, relevando aún más el papel que tiene el docente y su influencia dentro del aula. Adicionalmente, brindará a los docentes herramientas para hacer frente a un mundo cada vez más globalizado.

El docente tiene un papel importante en las universidades, dentro del contexto formativo; desde una visión holística se puede acompañar, claro está, como dicen los autores, se debe empezar a implementar los contenidos curriculares desde una herramienta crítica que permita un estudio desde la perspectiva inclusiva que ayude armónicamente a fomentar la diversidad y el humanismo en todos los ambientes sociales.

Para Cerdas-Agüero (2015), la educación para la paz es un proceso trascendental para la construcción de la cultura de paz; se visualiza esta como un proceso lento y complejo, pero realista, influenciado por una serie de factores sociales que se deben enfrentar y transformar; sobre todo, implica un proceso de cambio de mentalidad y de actitudes individuales y colectivas para el empoderamiento y la acción.

Hablar de paz en un clima agresivo es difícil, pero es la clave para compartir la esperanza. Es un caminar lento, pero no imposible, por lo que es necesario cambiar desde la familia, porque se deben transformar actitudes que se conviertan en aptitudes que ayuden a formar nuevas mentes de manera comunitaria que sean capaces de vivir de manera pacífica.

Desde la óptica de los investigadores Leiva et al. (2022), entre las modalidades radiales empleadas en la educación, se pueden señalar las adaptaciones radiales, pertenecientes al género dramático, cuya función principal es trasladar contenido literario al audio. Las adaptaciones radiales son denominadas también radiorealismo por generar un gran cúmulo de emociones; su mayor exponente fue la producción de Orson Welles “La invasión desde Marte”. Es importante tener en cuenta que, cuando se acompaña a jóvenes en proceso formativo, se puede dar una visión crítica de su aprendizaje; solo así se puede llegar a la concienciación de la realidad circundante.

Los estilos de vida de los narcotraficantes, proponiendo lo ilícito como un modelo rentable, con la misma idea de vivir una vida de consumos ilimitados, lujos y propiedades, mientras exponen la pobreza anterior como espacio superado de modo ilegal (Palaversich, 2015). Los narcotraficantes presentan una vida fácil, y siempre captan a jóvenes de bajos recursos que les ilusionan esa vida, que no tiene futuro. Creyendo que lo que ejercen en un espacio reducido puede cambiar la historia, formando desde una perspectiva sólida que conlleve cambiar la historia.

Frente a este proceso de transformación global, se vuelve necesario avanzar hacia un modelo de desarrollo con visión estratégica, que articule el compromiso del empresariado regional con una acción estatal decidida y eficiente. Este modelo debe incorporar como pilares fundamentales la sostenibilidad, la inclusión social y, de manera prioritaria, la educación. (Romero, 2025, p. 11)

Una de las prioridades de un país frente al clima de violencia, como lo enfatiza el autor, es que urgen cambios transcendentales donde se prioricen los esfuerzos en conjunto que conlleven la sostenibilidad, teniendo en cuenta la inclusión social, donde el punto de partida sea como pilar principal la educación; solo así dará respuesta al mundo globalizado.

Por su parte, Munevar et al. (2023) destacan que los resultados fundados en la evidencia empírica admiten que la estrategia de Actividad Física y Deportiva (AFD) así como los “juegos cooperativos ha generado efectos positivos en la mitigación de la agresión escolar rural, al lograrse porcentajes significativos de disminución de la agresión verbal, la hostilidad y la agresión física, como formas de violencia que se han de minimizar” (p. 350) en el ámbito educativo. Es evidente que, al desarrollar la parte lúdica en los estudiantes, contrarresta la violencia y fomenta la creatividad, encauzando las fuerzas positivas en actitudes de resiliencia que formarán seres amorosos, críticos y dadores de vida a las futuras generaciones.

1. Fundamentación teórica

1.1. Las narconovelas

En el ámbito de análisis de la televisión como influencia, algunas perspectivas más radicales vinculan las actuaciones de los sujetos a partir de la identidad que les proporcionan los programas televisivos, es decir, muchos jóvenes que han crecido frente a la pantalla vinculan rasgos de su personalidad e identidad con lo que les han transmitido y, en consecuencia, actúan de modo similar. Estos mismos teóricos consideran que desde que fue inventada la televisión “viene acompañando y dando soporte al proceso de la formación, y coincidiendo en que los medios, más que moldear y crear identidades, ofrecen patrones de comportamiento y de relaciones sociales mediante los que transmiten valores” (Montero, 2006, p. 50).

Las narconovelas son muy atrayentes para los jóvenes; además, la televisión tiene una primacía, haciendo que la dependencia sea adictiva, asumiendo que son programas formativos y de entretenimiento, alienando a todo tipo de audiencia, dejando entrever que son ejemplares, ubicando a los malos en el de buenos samaritanos.

Desde esta óptica, es necesario tener en cuenta que hay una realidad muy compleja con elementos que están presentes: Económicos, políticos, sociales, que conllevan desencadenar una problemática en especial con los jóvenes, que son los más vulnerables y que están expuestos a distractores fáciles de acomodarse a su realidad; además, carecen de un pensamiento crítico de la realidad, por ende, toda influencia externa es acogida como salida a sus carencias puntuales. En consecuencia, los programas televisivos van creando expectativas falsas en los jóvenes, generando en ellos una identidad ficticia que conlleva la pérdida de valores. Para Moreno (2019):

Está demostrado que el aumento de penas y las condiciones extremas por las que un reo debe pasar no son elementos que persuadan de no volver a cometer delitos. En algunos casos, inciden en el delito la venganza o el ajuste de cuentas. Por tanto, influyen en la reincidencia y el perfeccionamiento de la actividad delictiva. (p. 147)

Hoy las cárceles no dan espacios formativos para contrarrestar esta violencia, por muchos factores, como son la infraestructura que no ayuda, la corrupción de empleados que hacen cosas inadecuadas, por miedos, creando desconfianza. Todo esto implica un espiral de violencia que anida un sistema de ajustes de cuentas en los reos, generando aún más violencia, que no permite regenerarse, sino engrosar sistemas delictivos dentro de la misma cárcel.

¿Cómo no evidenciar este comportamiento en los adolescentes si su formación está siendo influenciada por todos los medios televisivos? Además, la situación actual está profundizando más sus emociones por los grupos violentos que desenmascaran un clima de intimidación en los diversos estratos sociales; por ende, no tienen referentes que los lleven a ver distinta la realidad. Por esta razón, se ve urgente retomar de manera estructural toda la realidad educativa.

De este modo, la adquisición de conocimientos y habilidades destinadas al abordaje de la competencia intercultural permitirá dar respuesta a la diversidad del alumnado, contribuyendo a fomentar una interacción armónica en ambientes de diversidad, relevando aún más el papel que tiene el docente y su influencia dentro del aula. (Pedraja-Rejas y Tovar-Correal, 2024, p. 600)

Uno de los elementos importantes en los que hacen énfasis los investigadores es el aporte del docente en la formación del estudiante, desde el acercamiento y la interacción a partir de la formación como base para crear ambientes de aprendizaje que permitan consolidar una enseñanza crítica de lo que aprenden y humanista de lo que practican.

Por lo que es importante identificar los factores negativos que los medios de comunicación producen e inciden en el comportamiento social, por lo que será fundamental tener una visión crítica de la información más precisa sobre el desarrollo de este fenómeno. Es de gran responsabilidad de los educadores traer a la palestra esta problemática, promoviendo extensos debates para reflexionar con mayor sensatez, madurez y sin escatimar recursos debido a la urgencia de la realidad que está viviendo la sociedad joven, que no tiene horizonte ni elemento de juicio crítico para optar por decisiones acertadas.

Para Moreno (2016), se trata entonces del tipo de acompañamiento, refiriéndose a la pasividad de los padres cuando no existe una socialización crítica cuando las consumen en compañía de sus hijos. La socialización por parte de los padres es importante porque son su primera fuente de enseñanza, ejemplo en la adquisición de conductas, normas y valores. Sin embargo, en algunos casos de los jóvenes de clases bajas, las propias enseñanzas de los padres refuerzan la aceptación del narcotráfico como un estilo de vida a seguir.

Es evidente que la poca capacidad que han tenido los padres para enfrentar de forma ejemplar no ayudó a los jóvenes a ser críticos de lo que aprenden de forma negativa y de no poderse empoderar de los valores, cayendo de manera fácil en las dádivas que les ofrecen los negocios de droga, haciendo de este negocio una vida fácil que no les permite tener nuevos horizontes de armonía.

Según Vidal (2023), los procesos de gestión, además de la participación, demandan del diseño de didácticas específicas. Así, varios de los procesos estudiados privilegian el diálogo como herramienta que permite a docentes, estudiantes y comunidad dirimir los problemas cotidianos de manera pacífica. La gestión de educar para la vida es un gran compromiso para esta nueva generación, por lo conflictivo que está pasando un país, por lo que es necesario manejar una didáctica de vida y debe conllevar clima de armonía, diálogo, para contrarrestar los diversos problemas delictivos; solo así se mejoraría un ambiente educativo, formativo.

La demanda y el forjamiento del respeto constituyen el modo como se gestionan cuatro amenazas a la identidad: La amenaza a la integridad física en un escenario marcado por el desamparo; la humillación de ser pobre y el peso de los límites de una sociedad marcada por la desigualdad, por la obstrucción de vías de movilidad social y gestión de conflictos; la amenaza de la desafiliación en una sociedad donde carecer de relaciones sociales personales representa el extremo de vulnerabilidad; la amenaza de no tener buenas razones para sentirse digno de reconocimiento y aprecio (Zubillaga, 2007).

Es evidente que, si no se toma en serio el problema de la narcoviolencia desde el Estado, se estatizará la pérdida de valores, dejando penetrar en la conciencia de los ciudadanos una amenaza de la pérdida de identidad, integridad tanto física como psicológica y del respeto a sí mismos, deteriorando las relaciones humanas en todos los contextos.

Según Vanegas et al. (2020), esa integración ha hecho que la regulación violenta de ofensas, diferencias y conflictos, se haya extendido al mundo político y económico legal, haciendo que la violencia involucre a personas y actividades sin ningún vínculo aparente con el narcotráfico o el crimen organizado. De esos esfuerzos espontáneos de regulación emerge la violencia compleja que preocupa.

La violencia ha penetrado en los distintos ambientes y estructuras del Estado, lo que conlleva a la comunidad a identificarse con estas actividades, dejando entrever el vínculo con la violencia y sus características, de un crimen organizado, arrastrando a la comunidad como algo normal dentro de su hábitat.

El reto se plantea en situar a la violencia más allá del ámbito privado e individual en el que priman criterios “curativos” o legales. Por supuesto, son importantes, y reconocerla como un hecho histórico social frente al cual la psicología debe aportar elementos para la búsqueda de un proyecto ético/social de construcción de sujeto y comunidad. Esto a través de la investigación y praxis, soportada en valores solidarios de respeto por el otro y formas diferentes de solucionar el conflicto. (Vaca y Rodríguez, 2009, p. 94)

Es necesario replantearse cómo combatir la violencia desde la óptica que conlleve dar respuestas individuales, desde el contexto histórico, dando contestaciones integrales, viendo a la persona en todos sus contextos (Fernández, 2024), implicando el conocer, el hacer y el ser, es decir, que conlleve unas respuestas éticas, a un trabajo en conjunto que promueva la vida armónica. Con valores como el respeto y la solidaridad, debe contribuir a la creación de un entorno ético y comunitario que promueva la construcción de sujetos y colectividades no violentas. 

Todo tipo de violencia genera afectaciones en quien la padece y en su entorno; en tal sentido, la Violencia de Género (VG) en el ámbito laboral también genera impactos. Para este documento, refiere a los efectos de tipo económico, que se generan en la empresa derivados de su incidencia en la afectación en el desempeño de la trabajadora (Cruz-Arroyo y Casique, 2019; López et al., 2023). La violencia está en todos los estratos sociales, la misma que repercute en la sociedad entera; por lo tanto, se debe combatir desde las diversas aristas productivas para que den respuestas congruentes al entorno y a la dignidad de las personas que conviven en ella.

1. 2. Programas agresivos

Los programas televisivos y series de narcos están llenos de violencia; además, los principales son los más impulsivos, haciendo creer que son los justicieros peleando por los más desprotegidos, marcando una fuerza justificada protectora llena de violencia, oficializando lo que hace, formalizando todo tipo de fanatismo.

Desde la óptica de Orozco (2021), se cuestionó el panorama del panóptico disciplinario de Michel Foucault. Todo ese exterior de violencia se interiorizó en el sujeto del rendimiento y de la eterna positivización, en la misma medida que se desarrolló una autoagresividad del sujeto, explotador y explotado en un mismo cuerpo. Ya no solo recurre a la visibilidad de la violencia social, sino a su invisibilidad que se interioriza y, sobre todo, permite la normalización de muchos actos violentos del espacio exterior. Por ello, la fuerza represiva del Estado es repudiada como forma de orden y control social, porque la fuerza de modelos psicopolíticos es más efectiva en su proceso de interiorización, aceptación y normalización.

Uno de los factores para que la violencia sea captada por los adolescentes es la pérdida de valores, trayendo consigo la realidad de violencia de familias desestructuradas, un Estado que aplica políticas de Estado para contrarrestar el terrorismo, la falta de empleo; los adolescentes han perdido horizonte, cada día tienen menos acceso a la educación; por ende, no es una formación que cubra sus necesidades de proyección. Todo esto es caldo de cultivo para que ellos elijan lo más fácil y cómodo para la solución de sus problemas.

Es verdad lo que la investigadora plantea, pero hay otro de los factores que crea violencia, tanto familiar como social: El entrar en la cárcel inocentemente y que lo juzguen sin motivo va anidando un sentimiento de venganza que conlleva a guardar agresividad en la familia y en la sociedad, creyendo que todo se les debe dar, evidenciando derechos, además culpando a inocentes que paguen el precio de sus debilidades.

No solo la televisión es fuente de violencia; también la poca estima y la agresividad de las que son víctimas las mujeres hacen que la violencia y la precaria atención en la familia, que están unidas a los programas, que no son supervisados por los adultos, porque ninguna empresa hace selección de programas para que estén al alcance de la población; solo les motiva ubicar la programación para ganar asiduos clientes, no para formar a la población joven. Es por esto por lo que no hay un control a nivel nacional; por lo tanto, los programas no educan ni orientan en valores, por lo que todo tipo de violencia que se dosifica por estos medios de comunicación sigue haciendo daño a la población joven.

Lo cierto es que la televisión tiene un papel demostrado en la manera cómo las personas evalúan su calidad de vida y potencia los riesgos asociados con el perfil económico y sociocultural de las audiencias. Es verdad que la televisión hoy en día solo piensa en lo económico y no en lo cultural; por ende, no está atenta a los programas que son nocivos para la audiencia de niños, adolescentes y adultos. No está en su perfil económico el analizar los programas que no son aptos para los espectadores; más bien están más preocupados por el aporte económico que brindan para la población.

No se puede educar desde los centros de formación con perspectiva de la no violencia cuando los jóvenes están siendo bombardeados en programas violentos, que no les posibilitan ser críticos de un sistema que no aporta a su aprendizaje porque no encuentran escenarios que les ayuden a tomar decisiones acertadas. Es importante trabajar por la construcción de la paz, pero al mismo tiempo, fomentar un nuevo escenario educativo, cimentado en valores de justicia y equidad. Es difícil ser congruente cuando la población vive escenarios de violencia sintiéndose impotente ante la realidad, sabiendo que la generación de violencia no conduce a los caminos de paz si no te ubicas en un contexto de resiliencia para sobrevivir al clima de violencia.

Para Reyes et al. (2019), en esta investigación se concluye, desde la percepción de los docentes, que los dibujos animados Pokémon y Dragon Ball Z influyen directamente sobre el comportamiento agresivo de los niños y niñas. Según los padres de familia, estos programas inciden en la conducta moral de sus hijos, creando agresiones físicas y psicológicas entre ellos; por otra parte, se concluye de los principales resultados de la entrevista realizada a los niños y niñas que los dibujos animados de su preferencia fueron Pokémon y Dragon Ball Z. Es evidente cómo las investigaciones que se han realizado respecto al tema, coinciden en que los programas de televisión son un elemento condicionante en la formación de niños y jóvenes, creando climas violentos que son asumidos por los jóvenes como un elemento de identidad dentro de su formación.

Los símbolos que se muestran en los diferentes sectores de la ciudad establecen el territorio debidamente marcado por las organizaciones delictivas, donde se dedican al expendio de sustancias estupefacientes, así como también dentro de los centros de rehabilitación social, con la finalidad de determinar quiénes son las personas que mantienen el mando en dicho territorio (Santillán et al., 2022).

Es evidente que hoy el Ecuador está llegando al límite de la violencia, tanto la organización delictiva unida a la venta de sustancias que se expanden en lugares conflictivos y hacinamientos como son las cárceles y lugares con carencias económicas, que por necesidad han tenido que escoger a esos grupos violentos creyendo que son las soluciones para sus vidas.

Milner y Crouch (2004), destacan que el daño o huella psíquica se obtiene a través de la medida de los efectos de un acto delictivo en la salud mental, siendo el trastorno primario en violencia de género y en la práctica forense el trastorno de estrés. Es difícil recuperar el daño psicológico que deja el nivel de violencia en niños y jóvenes, como también en personas adultas que han tenido una formación de violencia familiar, y que se acelera en el ambiente social. Es preocupante pensar en el nivel de sociedad que se está construyendo cuando el sistema de violencias se recrudece más cada día. Para la formación en centros educativos, es uno de los desafíos, de cómo crear hábitos de paz y armonía en estos ambientes duros y difíciles que la sociedad impone.

Se necesitan suficientes datos para hacer una explicación teórica o para verdaderamente generar conocimiento, así que cuando se habla de cuántas entrevistas u observaciones son suficientes, se dice que tantas como sean necesarias para poder desarrollar un estudio (Strauss y Corbin, 2002). Deja claro el autor que, para tener elementos con fundamentos, es necesario conocer procesos investigativos que ayuden a fundamentar la investigación y poseer elementos de juicio.

Mires-Agip et al. (2025), sostienen que: “Para la policía, prevenir estos conflictos representa un gran desafío, puesto que deben diseñar y ejecutar estrategias tácticas y operacionales para la intervención. En este contexto, el diálogo surge como una herramienta de comunicación” (p. 441). Es importante que se den espacios de comunicación entre la policía y la comunidad para que no se agudice la brecha problemática que se ha desarrollado con los policías por el maltrato con la gente que vive en la comunidad.

Según García et al. (2025), “para gestionar eficazmente las agresiones sexuales (…), es crucial conocer en detalle este entorno, relacionando los distintos vínculos que se efectúan entre el conflicto armado, la violencia de género y la estructura social local” (p. 135). Es de vital importancia tener presente que otro nivel de terrorismo que se vive en el país es la violencia de género, la xenofobia, con muchas mujeres que no tienen apoyo y que son presa del sistema de violencia.

Se constata que Salazar (2023), hace énfasis en que el hambre crece en zonas cocaleras y las estanterías de los comercios se vacían, sin respuesta clara al enigma. Campesinos en la frontera con Venezuela aseguraron a la AFP que la crisis coincidió con la extradición a una cárcel estadounidense de “Otoniel”, líder del mayor cartel conocido como Clan del Golfo. Es verdad que es difícil para los jóvenes salir de este lugar cuando has vivido toda tu vida en un clima donde no se viven los valores o se tienen trastocados unos estándares de vida únicos, sin tener posibilidad de ver otros. Por lo que la esperanza se ve ocultada en las marañas de necesidades a las que solo la violencia da respuestas a sus expectativas.

Para Sánchez (2012), el fenómeno de la agrupación delictiva y de las asociaciones criminales es diferente del llamado crimen organizado; sería menester que se diferenciara entre el programa criminal de dichos grupos delictivos. En ello, la ley no diferencia y resta efectividad al significado de crimen organizado, por cuanto del tenor del precepto, cualquier propósito delictivo, inclusive de un solo delito, podría ser considerado “crimen organizado” (p. 53).

Es cuestionable lo que el autor manifiesta: Que las agrupaciones delictivas se han estructurado de tal manera que no permiten buscar caminos deliberantes que ayuden a encontrar caminos de justicia y paz, estatizando a estos grupos como un gremio más de la sociedad, lo que aumenta el ego de los criminales para perpetuarse a costa de la vida de los demás.

2. Metodología

En la investigación realizada se tomó como población la Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí Extensión Sucre, en Ecuador, extrayendo una muestra de las carreras de educación básica, parvularia, enfermería, administración de empresa, contabilidad de 109 estudiantes. En la investigación se utilizaron los métodos cualitativos y cuantitativos. El método cuantitativo, es especialmente útil para investigaciones que requieren datos objetivos y mensurables, y que buscan establecer relaciones causales o patrones generales en una población. Este enfoque se utiliza en una amplia gama de disciplinas, como la psicología, la sociología, la economía, la medicina y la investigación de mercado, entre otras (Caballero et al., 2015).

En el enfoque de investigación de este proyecto mixto (cuali-cuantitativo), se ha determinado que lo más oportuno es la muestra no probabilística, dado que se trata de medir el impacto que generan las narconovelas en el comportamiento de los adolescentes y jóvenes, haciendo un análisis comparativo y no cuantificando dicho impacto. Este enfoque mixto proporciona una comprensión integral de las relaciones entre las narconovelas, programas que inciden en las conductas y decisiones, dando el enfoque combinado que proporciona una comprensión integral de las relaciones de las variables.

Desde el punto de vista ético, la investigación se desarrolló siguiendo principios fundamentales como el respeto a la dignidad humana, la confidencialidad y el consentimiento informado. A los participantes se les explicó previamente el propósito del estudio, garantizándoles el anonimato y asegurándoles que los datos recolectados serían utilizados únicamente con fines académicos y de manera confidencial.

Para Martínez (2007), el sujeto investigador y sujeto investigado tienen la misma importancia en la creación del conocimiento. La investigación en la práctica educativa: Guía metodológica de la investigación para el diagnóstico y evaluación en los centros docentes.

En general, las investigaciones en este campo incluyen solamente estudiantes de la Extensión Sucre; además, se aplicó el método Delphi. Fue de carácter descriptivo, sistemático, analítico; la técnica utilizada en la investigación estuvo dada por la encuesta, la misma que ayudó a recolectar la información. A través de un cuestionario como instrumento, que se aplicó a través de Google Forms; los datos se pasaron por el software SPSS 27, el mismo que permitió verificar la fiabilidad a través del alfa de Cronbach, dando una confiabilidad del instrumento de 0,986.

Según los resultados de esta investigación, se presentan de manera descriptiva e inferencial para cumplir con los objetivos propuestos, el método inductivo-cualitativo que tiene como base la implicancia del sujeto investigado. En el diagnóstico se pudo evidenciar resultados que partieron del estudio realizado del objeto de estudio, los mismos que aportaron un nuevo conocimiento para tener en cuenta en las futuras investigaciones, demostrando que el instrumento aplicado fue fiable, porque se constata que el alfa de Cronbach dio 0,953 de confiabilidad.

Como indicador para medir la fiabilidad del instrumento aplicado se utilizó el Alfa de Cronbach, cuyo resultado debe compararse con la unidad, entendiéndose que mientras el valor más se acerca a la unidad, mayor es el grado de confiabilidad del instrumento. En ese sentido, un Alfa de Cronbach de 0,953, significa que el instrumento aplicado es altamente confiable. Este resultado se obtuvo con un total de 4 elementos, indicando una elevada consistencia interna entre los ítems del instrumento.

3. Resultados y discusión

Como se constató a partir del resultado obtenido en la Tabla 1, la gran mayoría de los participantes manifestaron una percepción favorable respecto al aspecto evaluado, puesto que el 48,6% indicó estar «Mucho» de acuerdo y el 24,8% respondió «Poco», sumando un 75,2% acumulado que demuestra una clara tendencia positiva. Este resultado refleja cómo los individuos interiorizan y valoran ciertos elementos del contexto evaluado, generando una construcción colectiva de sentido que puede estar influenciada por factores sociales y culturales. Aunque una minoría del 7,3% expresó estar en desacuerdo, esta proporción resulta poco representativa frente al conjunto mayoritario.

Tabla 1

La violencia de los medios televisivos condiciona el comportamiento de los jóvenes

F

%

%A

En desacuerdo

8

7,3

7,3

Medianamente poco

21

19,3

26,6

Mucho

53

48,6

75,2

Poco

27

24,8

100,0

Total

109

100,0

Fuente: Elaboración propia, 2025.

Se destaca que los resultados que se muestran en la Tabla 2, evidencian que el gobierno ha trabajado poco por erradicar estos programas que están siendo caldo de cultivo para engrosar las filas de jóvenes que solo ven como alternativa los grupos rebeldes que van creando violencia en la familia y en la sociedad, manteniendo vigente un sistema violento a nivel social, haciendo atractivos los programas, sin una mente crítica del sistema.

Tabla 2

Las políticas de gobierno son claras en erradicar la violencia social y programas televisivos

F

%

%A

Nada

12

11,0

11,0

Algo

22

20,2

31.2

Poco

49

45,0

76,2

Mucho

26

23,9

100,0

Total

109

100,0

Fuente: Elaboración propia, 2025.

En la Tabla 3, se destaca la percepción de muchos jóvenes los cuales manifestaron que la violencia viene dada desde estas novelas y películas, pero no dejan de verlas y siguen prefiriendo estos programas, que según ellos son de entretenimiento; no son conscientes de que generan violencia y que van creando estructuras históricas violentas que luego la reflejan en la convivencia diaria, adoptando una personalidad distinta de lo que son ellos mismos.

Tabla 3

Las novelas, películas son referentes para fomentar la violencia

F

%

%A

Nada

12

11,0

11,0

Algo

22

20,2

31.2

Poco

49

45,0

76,2

Mucho

26

23,9

100,0

Total

109

100,0

Fuente: Elaboración propia, 2025.

Lo más preocupante es que los jóvenes no asumen que los programas televisivos influyen negativamente; lo toman como una forma de crear relaciones positivas, porque pensando y actuando iguales superarían las condiciones de pobreza, justificando las acciones violentas, las mismas que, según ellos, les ayudarían económicamente y subirían su nivel educativo y su estatus social.

Orozco (2021), manifiesta que las perspectivas de la violencia en jóvenes de la Comuna 13 de Medellín, son elementos que cuestionó el panorama que pretende sostener, manifestando que la televisión influye sobre los comportamientos y se vinculó a la relación histórica y social de la violencia que produce el microtráfico, las bandas organizadas y la justicia por mano propia, estableciendo correlaciones con la realidad social y no una influencia para actuar como tal. En este trabajo, donde el investigador enmarca a la realidad social y las narconovelas, enfatiza un alto contenido emocional que conllevan estas series: Retroalimentar los sueños de los jóvenes de manera fácil, rompiendo los esquemas valorativos y, de manera muy subliminal, el querer replicar esa realidad en su entorno.

Para Castrillón (2017); y, Fernández y Giraldo (2018), uno de los elementos que salen a relucir y que es un mecanismo para convencer a la persona es jugar con la psicología, como es: La excitación emocional se asocia con la intención de humanizar a Escobar y el intento por construir su imagen de hombre familiar, de esposo protector que siente, que llora y que sufre, con valores emocionales. Los jóvenes en este siglo solo viven de emociones, se fijan en el presente, viven el instante, no tienen visión de futuro, lo que hace que pierdan una perspectiva global de la vida, dejándose llevar por el momento, perdiendo la esperanza de pensar en días mejores.

Después de haber analizado varios trabajos referentes al tema tratado, se han encontrado experiencias que fueron referentes para confrontar resultados, como son: La ONU (2004), desde la Secretaría General, en la Convención de las Naciones Unidas contra la delincuencia organizada transnacional y sus protocolos, manifiesta que:

Los grupos delictivos no han perdido el tiempo en sacar partido de la economía mundializada actual y de la tecnología sofisticada que la acompaña. En cambio, nuestros esfuerzos por combatirlos han sido hasta ahora muy fragmentarios y nuestras armas casi obsoletas. La Convención nos facilita un nuevo instrumento para hacer frente al flagelo de la delincuencia como problema mundial. Fortaleciendo la cooperación internacional podremos socavar verdaderamente la capacidad de los delincuentes internacionales para actuar con eficacia y ayudaremos a los ciudadanos en su a menudo ardua lucha por salvaguardar la seguridad y la dignidad de sus hogares y comunidades (Asociación Iberoamericana de Ministerios Públicos [AIAMP], 2018, p. 5)

La realidad que menciona Kofi Annan en la ONU es evidente y cada día se evidencia con más fuerza, por la falta de un trabajo en conjunto, por no tener políticas comunes que conlleven al bien común. El no unificar criterio es el mal que agravaba a los pueblos y acrecentaba la violencia, tanto por la delincuencia como por el narcotráfico, que se va empoderando de las mentes de niños y adolescentes y jóvenes que son conejillos de indias para los grandes de la mafia.

Asimismo, Sandoval (2006) en el trabajo realizado de los efectos de la televisión sobre el comportamiento de las audiencias jóvenes desde la perspectiva de la convergencia y de las prácticas culturales. Las investigaciones presentadas en este artículo contribuyen a la comprensión del papel de los medios de comunicación masiva en la consolidación de prácticas prosociales en las audiencias infantiles y juveniles.

Por consiguiente, este objetivo será difícil de lograr si no se toma en serio a la televisión y si se es indiferente a la gran cantidad de estudios disponibles que demuestran los efectos de la televisión: Muy pocas investigaciones han encontrado que la televisión sea un medio inocuo; por el contrario, se ha indicado que posee efectos combinados con otros medios de socialización y que, bajo condiciones sociales desfavorables, agudiza el impacto de la violencia y el contexto antisocial de las audiencias.

Es evidente que no se quiere sancionar, satanizar los medios de comunicación televisivos; simplemente es analizar qué programas hacen de los jóvenes más críticos de lo que ven, escuchan, y qué valores están viviendo en su formación profesional, psicológica. En esta sociedad tan convulsionada, es necesario cambiar las estructuras comunicacionales, los modelos biográficos, que no tengan ese alto contenido emocional que proponen las novelas violentas, que hacen que los jóvenes crean que son similares a la de ellos, creyendo que retroalimentan su realidad en forma de entretenimiento, sin darse cuenta de que están haciendo una estructura para su forma de vida actual.

Los principales hallazgos revelan que las narconovelas con contenidos violentos predominantes atraen la atención de los adolescentes, influyendo así en la adopción de conductas propias de los personajes. Así mismo, se evidencia que los adolescentes que ven este tipo de telenovelas durante períodos entre tres y cinco años presentan conductas desafiantes. A partir de los resultados obtenidos en el estudio y a fin de incidir en el abordaje de esta temática con adolescentes, se elaboró un manual de intervención en conductas desafiantes en adolescentes dirigido a psicólogos y consejeros escolares, como propuesta de trabajo para el centro educativo (Arróliga et al., 2017).

El trabajo investigativo demostró que la violencia es uno de los elementos que a los jóvenes los cautiva, principalmente a los adolescentes que aún no tienen su personalidad desarrollada y que viven en una burbuja sin darse cuenta de que están fuera de la realidad; por ende, son los que más necesitan amor, crear un clima de armonía y de una visión crítica de la realidad para que sea realista su entorno.

Conclusiones

En la investigación se evidenció que los jóvenes no toman conciencia de que las telenovelas, narconovelas y programas televisivos, influyen en sus conductas y en su manera de relacionarse con los demás, y toman muy a la ligera la observación de estos programas, que no les dan una formación con valores, solamente distorsionan la realidad para justificar que los contenidos que observan son legales y sobredimensionan las acciones violentas, haciendo vida en sus realidades.

Estas consecuencias que se evidenciaron en la investigación traen consigo una desintegración familiar, lo que conlleva una crisis de valores desde la praxis, constituyendo un impacto negativo desde la familia, la comunidad y en el rendimiento escolar, en su capacidad para percibir la realidad comunitaria; en consecuencia, conllevando conductas inciertas y una desorientación personal y colectiva. La pérdida de valores en los jóvenes y niños, aumentando la delincuencia, problemas de violencia colectiva, salud mental, depresión, llevándolos al consumo de sustancias dañinas para la vida.

Hoy los escenarios del futuro de los jóvenes están marcados por la violencia. La realidad se ha tornado dura, difícil, donde los valores se han trastocado, justificando que no tiene referente y que tienen que asumir lo que les toca, sin dar razón de lo que hacen, manifestando, evidenciando que esa violencia es la que sobrevive para su toma de decisiones, justificando una realidad ficticia, acogiéndola como verdad que le da la sociedad, aunque no estén conformes con la misma.

Uno de los elementos que conlleva fomentar la violencia, por ende, al accionar de los jóvenes, es la falta de valores como la inclusión a medios accesibles para que estos se sientan acompañados, que se evidencie el respeto a los derechos humanos. Para ello, tanto el Estado como la comunidad deben actuar con responsabilidad, aplicando una visión ética humanista, responsable, que ayude a fomentar el buen vivir y dejando que la violencia razonada sea uno de los parámetros para la armonía y paz del país ecuatoriano.

Es público que en Ecuador se están viviendo tiempos conflictivos, que conllevan una violencia familiar, social, estatal, que no permite al ser humano razonar desde la verdad y desde unos criterios armónicos. Se ve necesario que se conlleve a una práctica emergente para disminuir los problemas que arrastran a jóvenes y adolescentes a tomar decisiones violentas, afirmando más la brecha de violencia; por esta razón, urge generar cambios trascendentales, procurando el bienestar de la comunidad mediante el uso racional, emocional, afectivo desde la armonía, el conocer, el hacer y el ser.

Referencias bibliográficas

Arróliga, A. D., Càlix, A. G., Gómez, M. F., y Solís, F. (2017). Influencia de las narconovelas en el desarrollo de conductas desafiantes en adolescentes de secundaria de Estelí, Nicaragua. Revista Científica de FAREM-Estelí, 6(22), 50-60. https://doi.org/10.5377/farem.v0i22.4521

Asociación Iberoamericana de Ministerios Públicos - AIAMP (2018). Mecanismos de cooperación penal internacional: La extradición y las guías rápidas sobre extradición para los Estados de la Asociación Iberoamericana de Ministerios Públicos (AIAMP). Centro de Formación de la Cooperación Española. https://intercoonecta.aecid.es/Gestin%20del%20conocimiento/AIAMP.pdf

Caballero, C. C., Breso, É., y González, O. (2015). Burnout en estudiantes universitarios. Psicología desde el Caribe, 32(3), 424-441. https://rcientificas.uninorte.edu.co/index.php/psicologia/article/view/6217

Cabrera, B., Serrano-Moreno, M. S., Castro, E. M., y Cabrera, M. F. (2024). Ética en las funciones sustantivas del quehacer Universitario. Testimonios docentes. Revista Venezolana de Gerencia, 29(108), 1630-1648. https://doi.org/10.52080/rvgluz.29.108.10

Castrillón, E. A. (2017). Imagen e imaginario de Pablo Escobar en Escobar, el patrón del mal: Realidad y ficción sobre el narcotráfico en Colombia [Tesis de maestría, Universidade Federal da Integração Latino-Americana UNILA]. https://dspace.unila.edu.br/items/44f14594-feaf-4794-82ae-0429be6fe43e

Cerdas-Agüero, E. (2015). Desafíos de la educación para la paz hacia la construcción de una cultura de paz. Revista Electrónica Educare, 19(2), 135-154. http://dx.doi.org/10.15359/ree.19-2.9

Cruz-Arroyo, V. B., y Casique, I. (2019). Violencia laboral. Análisis de los factores de riesgo y consecuencias en la vida de las mujeres trabajadoras en la Ciudad de México. Papeles de Población, 25(102), 51-79. https://doi.org/10.22185/24487147.2019.102.32

Fernández, C., y Giraldo, S. (2018). Narcos o la caricatura narcótica de una realidad de terror. En S. Giraldo (Ed.), ¿Por qué amamos a Pablo Escobar? Cómo Netflix revivió al narcotraficante más famoso del mundo (pp. 161-184). Editorial UOC.

Fernández, J. (2024). La violencia sexual: Factores de riesgo, perfil del agresor y marco normativo. Cuadernos de RES PUBLICA en Derecho y Criminología, (4), 104-117. https://www.researchgate.net/publication/379656812_violencia_sexual_Factores_de_riesgo_perfil_del_agresor_y_marco_normativo

García, Y. E., Ospino, Y. P., Negrette, A. M., y Arteaga, D. D. J. (2025). Agresiones sexuales en mujeres víctimas del conflicto armado en la zona de los Montes de María - Colombia. Revista de Ciencias Sociales (Ve), XXXI(1), 133-145. https://doi.org/10.31876/rcs.v31i1.43494

Leiva, Z. D., Cárdenas, A., Duran, K. L., y Ortega, M. Y. (2022). Medio de comunicación radial y competencias comunicativas en estudiantes del Perú. Revista de Ciencias Sociales (Ve), XXVIII(E-5), 390-401. https://doi.org/10.31876/rcs.v28i.38170

López, V. G., Moreno, L. R., González, V. M., y Valenzuela, M. M. (2023). Impactos de la violencia de género en el desempeño laboral de las trabajadoras en México. Revista de Ciencias Sociales (Ve), XXIX(2), 199-215. https://doi.org/10.31876/rcs.v29i2.39971

Martínez, R.-A. (2007). La investigación en la práctica educativa: Guía metodológica de la investigación para el diagnóstico y evaluación en los centros docentes. Colección: Investigamos No. 5. Centro de Investigación y Documentación Educativa CIDE https://universitas82.wordpress.com/wp-content/uploads/2013/08/la-investigacic3b3n-en-la-prc3a1ctica-educativa.pdf

Milner, J. S., y Crouch, J. L. (2004). El perfil del niño víctima de violencia. En J. Sanmartín (Coord.), El laberinto de la violencia: Causas, tipos y efectos (pp. 195-203). Editorial Ariel.

Mires-Agip, D. J., Canchumanya, D., Ancaya, M. D. C. E., y Flores, G. S. (2025). Comunicación como herramienta en los conflictos sociales por la Policía Nacional del Perú. Revista de Ciencias Sociales (Ve), XXXI(2), 440-453. https://doi.org/10.31876/rcs.v31i2.43777

Montero, Y. (2006). Televisión valores y adolescencia. Gedisa Editorial.

Moreno, A. I. (2019). El delito como castigo: Las cárceles colombianas. URVIO: Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad, (24), 134-149. https://doi.org/10.17141/urvio.24.2019.3778

Moreno, J. (2016). La recepción de narcotelenovelas por jóvenes de la Ciudad de Bogotá [Tesis de maestría, Universitat de Barcelona].

Munevar, S. K., Burbano, V. M., y Valdivieso, M. A. (2023). Mitigación de la violencia rural en Santander-Colombia: Una estrategia para menguar la agresión escolar. Revista de Ciencias Sociales (Ve), XXIX(2), 340-355. https://doi.org/10.31876/rcs.v29i2.39980

Organización de las Naciones Unidas - ONU (2004). Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia Organizada Transnacional y sus protocolos. ONU. https://www.unodc.org/documents/treaties/UNTOC/Publications/TOC%20Convention/TOCebook-s.pdf

Orozco, A. F. (2021). Realidad social y narconovelas. Perspectivas de la violencia en jóvenes de la Comuna 13 de Medellín. Estudios Políticos, (60), 204-223. https://doi.org/10.17533/udea.espo.n60a09

Palaversich, D. (2015). La seducción de las mafias: La figura del narcotraficante en la narcotelenovela colombiana. Hispanófila, 173, 349-364. https://doi.org/10.1353/hsf.2015.0017

Pedraja-Rejas, L., y Tovar-Correal, M. (2024). Competencia intercultural en la formación inicial docente en universidades fronterizas chilenas. Revista Venezolana de Gerencia, 29(E-11), 591-605. https://doi.org/10.52080/rvgluz.29.e11.35

Reyes, M. L., Quezada, E. E., y Sigüenza, W. G. (2019). Influencia de programas televisivos en el comportamiento de los niños de educación básica. Revista San Gregorio, (29). https://revista.sangregorio.edu.ec/index.php/REVISTASANGREGORIO/article/view/622

Romero, J. (2025). Editorial. Transformaciones económicas, sociales, educativas y territoriales para el desarrollo sostenible: Aportes desde la inclusión, la innovación y la equidad. Revista de Ciencias Sociales (Ve), XXXI(E-11), 11-15. https://doi.org/10.31876/rcs.v31i.44036

Salazar, D. (27 de mayo de 2023). El fentanilo desplazó a la cocaína: La impactante transformación del mercado de las drogas en Colombia. Infobae. https://www.infobae.com/colombia/2023/05/27/el-fentanilo-desplazo-a-la-cocaina-la-impactante-transformacion-del-mercado-de-las-drogas-en-colombia/

Sánchez, C. (2012). Sobre el concepto de crimen organizado. Significación de su contenido en la legislación penal salvadoreña. Revista Policía y Seguridad Pública, 2(1), 27-62. https://camjol.info/index.php/RPSP/article/view/1358

Sandoval, M. (2006). Los efectos de la televisión sobre el comportamiento de las audiencias jóvenes desde la perspectiva de la convergencia y de las prácticas culturales. Universitas Psychologica, 5(2), 205-222.

Santillán, A. L., Vinueza, N. V., Benavides, C. F., y Santillán, S. J. (2022). Drogas, tráfico y crimen organizado como detonante de actos violentos en las cárceles del Ecuador. Universidad y Sociedad, 14(3), 478-486. https://rus.ucf.edu.cu/index.php/rus/article/view/2888

Strauss, A., y Corbin, J. (2002). Bases de la investigación cualitativa: Técnicas y procedimientos para desarrollar la teoría fundamentada. Editorial Universidad de Antioquia.

Vaca, P., y Rodríguez, M. C. (2009). Responsabilidad social de la Psicología frente a la violencia. Pensamiento Psicológico, 6(13), 87-96. https://revistas.javerianacali.edu.co/index.php/pensamientopsicologico/article/view/145

Vanegas, G., Salazar-Trujillo, B., y Castillo-Valencia, M. (2020). Violencia compleja en una red de narcotraficantes y políticos en Colombia. URVIO, Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad, (28), 47-61. https://repositorio.flacsoandes.edu.ec/server/api/core/bitstreams/4443d942-7bd5-41ad-91de-fdaa8570e315/content

Vidal, J. E. (2023). Gestión de las didácticas dirigidas a la promoción de la Educación para la paz en Colombia. Revista Venezolana de Gerencia, 28(104), 1765-1778. https://doi.org/10.52080/rvgluz.28.104.24

Zubillaga, V. (2007). Los varones y sus clamores: Los sentidos de la demanda de respeto y las lógicas de la violencia entre jóvenes de vida violenta de barrios en Caracas. Espacio Abierto, 16(3), 577-608. https://produccioncientificaluz.org/index.php/espacio/article/view/1263