De la crisis petrolera a la emergencia del liderazgo carismático: Arnoldo Struve y la reconfguración del destino comunitario Naida Arrieta Ríos* RESUMEN Este artículo examina el papel del liderazgo carismático en procesos de transformación social, tomando como caso el de Arnoldo Struve durante la reubicación de Pueblo Vie - jo a Mene Grande en 1966. A través del análisis de testimonios orales, documentos, fotografías de archivo y artículos periodísticos, se explora cómo una fgura individual logró movilizar a una comunidad en crisis, negociar con una corporación petrolera y redefnir el destino colectivo. Inspirado en el modelo de Geertz sobre estructuras de la personalidad y en la teoría weberiana del carisma, se argumenta que Struve funcio - nó como un agente catalizador en un contexto de tensión cultural, crisis ambiental y debilidad institucional. El artículo demuestra que su autoridad no se basó en el poder formal, sino en una convicción personal que generó consenso y acción colectiva. Ade - más, se analiza cómo el carisma se institucionalizó parcialmente, dejando un legado simbólico en la comunidad. El estudio contribuye al campo de la antropología política y a la comprensión del cambio social desde una perspectiva interpretativa. Palabras clave: Liderazgo carismático, Arnoldo Struve, Reubicación, Crisis social, Cambio cultural. * MSc y Doctora en Antropología (Universidad del Zulia y Universidad de los Andes, respectivamen - te). Docente e investigadora jubilada de la Universidad Nacional Experimental Rafael María Baralt, adscrita al departamento de artes y música del Programa Educación. Sus temas de investigación se centran en los aspectos antropológicos de las expresiones artísticas, particularmente la mú - sica, así como los elementos identitarios en torno a la espacialidad y territorialidad. Correo-e: naidaarrieta@gmail.com . ORCID: 0009-0000-8091-8695 . Opción : Revista de Ciencias Humanas y Sociales. Año 41 N° 106 (enero-abril 2025), pp. 99-112 Universidad del Zulia. Facultad Experimental de Ciencias ISSN 1012-1587 / ISSNe: 2477-9385 Recibido: 15/09/2024 Aceptado: 20/11/2024
100 Opción. Año 41 N° 106 (enero-abril 2025): 99-112 ISSN 1012-1587 / ISSNe: 2477-9385 Naida Arrieta Ríos* From the Oil Crisis to the Emergence of Charismatic Leadership: Arnoldo Struve and the Reconfguration of Community Destiny ABSTRACT Tis article examines the role of charismatic leadership in processes of social transfor - mation, using the case of Arnoldo Struve during the relocation of Pueblo Viejo to Mene Grande in 1966. Trough the analysis of oral testimonies, documents, archival photo - graphs, and newspaper articles, it explores how an individual fgure managed to mobi - lize a community in crisis, negotiate with an oil corporation, and redefne the collective destiny. Inspired by Geertz’s model of personality structures and Weberian charisma theory, it is argued that Struve acted as a catalytic agent in a context of cultural ten - sion, environmental crisis, and institutional weakness. Te article demonstrates that his authority was not based on formal power but on personal conviction, which generated consensus and collective action. Additionally, it analyzes how charisma was partially institutionalized, leaving a symbolic legacy within the community. Te study contribu - tes to the feld of political anthropology and to the understanding of social change from an interpretive perspective. Keywords: Charismatic leadership, Arnoldo Struve, Relocation, Social crisis, Cultural change. INTRODUCCIÓN El 18 de julio de 1966, el diario El Nacional publicó un artículo titulado “El Tejero petrolero espera el colapso fnal” , en el que describía la angustia colectiva de los habitantes de Pueblo Viejo, una comunidad asentada sobre palaftos en el lago de Maracaibo. El suelo se hundía, el agua estaba contaminada por el petró - leo, y la Caribbean Petroleum Company (flial de Shell) había dejado de invertir en servicios básicos. La población enfrentaba una crisis existencial: ¿quedarse a morir o abandonar el territorio ancestral? En este contexto de desesperanza, emergió una fgura clave: Arnoldo Struve, maestro de escuela y líder comunita - rio, cuya intervención decisiva transformó el curso de los acontecimientos. Para contextualizar la magnitud del peligro, se puede citar la cobertura perio - dística de la época sobre un derrame previo: “La gráfca es elocuente. La capa de petróleo calculada por los habitantes de Pueblo Viejo de Agua en una pulgada, se refeja notablemente sobre las aguas del Lago de Maracaibo [...]. Entre las personas que residen en la humilde población lacustre, se ha producido el com - prensible temor de que llegue a ocurrir una tragedia similar a la de Lagunillas de Agua en 1939” (Panorama, 23-4-1965). El impacto en la vida diaria era devastador, como lo demuestra este testimo - nio sobre las tareas más básicas: “Esa ropa, tan blanca, tendida al sol se man -
101 Opción. Año 41 N° 106 (enero-abril 2025): 99-112 ISSN 1012-1587 / ISSNe: 2477-9385 De la crisis petrolera a la emergencia del liderazgo carismático: Arnoldo Struve y la reconfguración... chaba cada vez que alguno de los pozos cercanos salpicaba petróleo; y con cada derrame, había que esperar para cocinar o prender una lámpara, no fuese a pasar lo mismo que pasó en el incendio de Lagunillas de Agua”. Este artículo analiza el caso de Struve como un ejemplo paradigmático de liderazgo carismático en un contexto de modernización forzada. A diferencia de líderes que actúan desde posiciones institucionales, Struve ejerció su autoridad desde la base, a través de la persuasión, la convicción y una relación de confanza con la comunidad. Su fgura no está documentada en los anales ofciales de la empresa ni en la historiografía nacional, pero permanece viva en la memoria oral de los habitantes de Mene Grande. La pregunta central de esta investigación es: ¿cómo una fgura individual puede transformar el destino de una comunidad en crisis? Para responderla, se analizan los testimonios recopilados por Naida Arrieta Ríos (2020), fotografías de archivo, artículos de prensa y documentos corporativos. Se argumenta que Struve no solo fue un mediador entre la comunidad y Shell, sino un agente sim - bólico que reconfguró las representaciones colectivas del progreso, el territorio y la identidad. El artículo se justifca por la escasez de estudios etnográfcos sobre fguras de liderazgo en comunidades petroleras venezolanas. Aporta una mirada crítica sobre cómo el cambio social no siempre proviene de estructuras, sino de indivi - duos que, en momentos de crisis, canalizan la energía colectiva hacia una acción transformadora. 1. MARCO TEÓRICO 1. 1. LIDERAZGO CARISMÁTICO: MAX WEBER Max Weber (1968) defne el carisma como una forma de autoridad basada en la creencia extraordinaria en las cualidades heroicas, revelatorias o ejemplares de un individuo. A diferencia de la autoridad tradicional (basada en costum - bres) o la racional-legal (basada en leyes), el carisma es efímero y personal. Su legitimidad no reside en una institución, sino en la relación entre el líder y sus seguidores. Weber señala que el carisma es especialmente relevante en momentos de cri - sis, cuando las estructuras tradicionales se debilitan y surge la necesidad de un salvador. En este sentido, Struve encarna el perfl del líder carismático: no era un funcionario de la empresa ni un político, sino un maestro que, por su posición moral y su conocimiento del entorno, fue percibido como la única fgura capaz de negociar con Shell.
102 Opción. Año 41 N° 106 (enero-abril 2025): 99-112 ISSN 1012-1587 / ISSNe: 2477-9385 Naida Arrieta Ríos* La naturaleza de su liderazgo, surgido de una motivación personal y no de un cargo ofcial, se resume en su propia refexión sobre sus inicios: “Cual quijote co - menzó una cruzada personal, su liderazgo como maestro es usado para alcanzar su objetivo: sacar a la gente de Pueblo Viejo de la miseria, la pobreza y la igno - rancia y así conducirlos por el camino del progreso y la superación”. Esta visión, que él mismo impulsó, fue el motor de su autoridad carismática. El proceso de institucionalización del carisma también es clave. Weber sostie - ne que, para que el carisma perdure, debe convertirse en una forma de autoridad estable. En el caso de Struve, aunque no dejó una institución formal, su legado persiste en la memoria colectiva como el “cacique” que salvó al pueblo. 1.2. ESTRUCTURA DE LA PERSONALIDAD Y CAMBIO CULTURAL: CLIFFORD GEERTZ Cliford Geertz (1973), en Te Interpretation of Cultures , introduce el concep - to de estructura de la personalidad como un modelo que explica cómo ciertos in - dividuos actúan como catalizadores del cambio cultural. Para Geertz, las culturas no cambian por fuerzas impersonales, sino por la acción de fguras que encarnan valores contradictorios: lo tradicional y lo moderno, lo local y lo externo. Struve es un ejemplo de esta estructura híbrida: por un lado, era parte de la comunidad, conocía sus rituales (como el culto a San Benito) y compartía su sufrimiento; por otro, tenía acceso al lenguaje del poder, podía negociar con ejecutivos extranjeros y comprender las lógicas corporativas. Esta dualidad lo convirtió en un puente simbólico entre dos mundos. 1.3. PODER, CONSENSO Y DISENSO: GRAMSCI, WILLIAMS, SCOTT Antonio Gramsci (1981) introduce la noción de intelectual orgánico: al - guien que surge del seno de una clase subordinada y articula sus intereses frente al poder dominante. Struve, como maestro, era un intelectual orgánico: no esta - ba separado de su comunidad, pero tenía la capacidad de traducir sus demandas al lenguaje de la empresa. Raymond Williams (1997) complementa esta idea al hablar de la cultura como un campo de dominación y resistencia. Struve no solo reprodujo el or - den corporativo, sino que lo negoció, introduciendo elementos de disenso. Por ejemplo, exigió que el trato fuera “cambio de casa por casa”, una condición que humanizó el proceso de reubicación. James C. Scott (2000), en Domination and the Arts of Resistance , analiza cómo los subordinados expresan su resistencia de formas encubiertas. Struve canalizó estas resistencias latentes en una acción colectiva organizada, transfor - mando la pasividad en agencia.
103 Opción. Año 41 N° 106 (enero-abril 2025): 99-112 ISSN 1012-1587 / ISSNe: 2477-9385 De la crisis petrolera a la emergencia del liderazgo carismático: Arnoldo Struve y la reconfguración... 1.4. NEGOCIACIÓN DEL PODER: SWARTZ, TURNER Y TUDEN La primera gran síntesis de una amplia gama de perspectivas de estudio del poder en las ciencias antropológicas fue Political Anthropology , obra compilada por Marc Swartz, Victor Turner y Arthur Tuden (1966). En ella, se anunció la emergencia del paradigma procesual, que plantea que el análisis de los procesos políticos implica explicar con profundidad la resolución de confictos, la toma de decisiones y la negociación de disputas. Este enfoque permite interpretar la junta de negociación como un campo de disputa simbólica , donde Struve actuó como mediador entre la comunidad y la corporación. 2. METODOLOGÍA Este estudio se basa en un enfoque cualitativo, de tipo etnográfco e his - tórico-interpretativo. Se utilizaron técnicas del método de historia de vida, como el relato rememorativo, la entrevista y la autobiografía, según la me - todología de Arrieta Ríos (2023). Se realizaron entrevistas semiestructura - das con cuestionarios para asegurar informaciones completas y comparables. Además, se elaboraron cuadros de análisis de contenido con cuatro aparta - dos: (1) tema, (2) testimonio textual, (3) comentario explicativo y (4) infe - rencias preliminares, lo que permitió una triangulación entre datos orales, visuales y teóricos. Se utilizaron las siguientes técnicas: Revisión documental: Se analizaron artículos de El Nacional (1966), Pa - norama (1963–1968), y documentos de la Colección Arnoldo Struve. Análisis de contenido de testimonios orales: Se examinaron relatos de informantes clave, como Rodulfo Estrada, María del Rosario Estrada y Luis Gallardo, recopilados por Arrieta Ríos entre 2008 y 2014. Análisis fotográfco: Se estudiaron imágenes de archivo, como la Foto - grafía 1 (Struve junto a Keneth Wether, ejecutivo de Shell) y la Fotogra - fía 2 (entrega de camiones). Triangulación metodológica: Se combinaron datos orales, visuales y es - critos para validar las interpretaciones. La selección de informantes se basó en criterios de pertenencia: ser residente original de Pueblo Viejo, haber participado en el proceso de reubicación y ser miembro de los vasallos de San Benito.
104 Opción. Año 41 N° 106 (enero-abril 2025): 99-112 ISSN 1012-1587 / ISSNe: 2477-9385 Naida Arrieta Ríos* 3. EL CONTEXTO DE CRISIS: ENTRE EL HUNDIMIENTO Y EL ABANDONO En 1966, Pueblo Viejo enfrentaba una crisis multifacética. El terreno se hun - día, las casas se destruían, y la compañía petrolera no invertía en infraestructura. Un informante recuerda: “Ya no podíamos vivir allí, el suelo se comía las casas”. El artículo de El Nacional (1966) describe una “situación de angustia que parece prender sobre las pocas cabezas que aquí quedan, a la espera del colapso fnal”. En este escenario, la comunidad estaba fragmentada: algunos querían que - darse, otros pedían ayuda, pero nadie tenía una estrategia clara. Fue en este vacío de poder que emergió Struve. Como señala Remigio González (2010), uno de los habitantes de Pueblo Viejo: “Pueblo Viejo era un lugar donde uno se sentía en paz. Vivíamos del río, del pescado, de lo que nos daba el agua. No teníamos mucho dinero, pero sí teníamos tranquilidad. El problema empezó cuando el petróleo llegó y el sue - lo se hundió. Ahí fue cuando Arnoldo Struve dijo: ‘esto no puede seguir así’”. Este relato ilustra cómo la crisis no fue solo material, sino también emocional, y cómo Struve se posicionó como una voz de autoridad moral en un momento de desesperanza.2. La emergencia del liderazgo: el ultimátum Struve, como maestro, tenía una posición moral en la comunidad. Convocó una junta para negociar con Shell, pero las discusiones no avanzaban. La com - pañía ofreció tres opciones: La Concepción, Mara y Mene Grande. La gente no quería irse lejos, y no se ponían de acuerdo. Fue entonces cuando Struve dio un ultimátum: “si no se ponían de acuerdo, abandonaría la junta”. Esta acción decisiva rompió el estancamiento. Como se - ñala un informante: “Sin Struve, no habríamos salido de allí”. La raíz de su determinación se encontraba en una convicción forjada desde su niñez, un rechazo profundo al destino que parecía predeterminado para él y su comunidad. El propio Struve lo resume de manera contundente: “es que yo siempre le decía a mamá no quiero ser pescador”. Esta declaración no es un sim - ple dato biográfco, sino el núcleo de su estructura de personalidad que, como argumenta Geertz, catalizaría el cambio cultural. Este momento es clave: no fue una imposición, sino una estrategia dramática para forzar una decisión colectiva. Struve no actuó como un dictador, sino como un facilitador que asumió el riesgo de la responsabilidad. La percepción del carisma de Struve no era solo colectiva, sino también fami - liar. Su hermano Félix Struve (2010) recuerda: “Mi hermano no era un político,
105 Opción. Año 41 N° 106 (enero-abril 2025): 99-112 ISSN 1012-1587 / ISSNe: 2477-9385 De la crisis petrolera a la emergencia del liderazgo carismático: Arnoldo Struve y la reconfguración... ni tenía cargo en la empresa. Pero tenía una convicción muy fuerte. Él decía que no podíamos quedarnos a morir. Reunió a la gente, habló con Shell, y logró que nos dieran casas nuevas. No fue fácil, pero él no se rendía”. Esta declaración refuerza la idea de que el carisma no reside en el cargo, sino en la convicción personal y la capacidad de movilización. Fotografía 1. Arnoldo Struve junto a Keneth Wether. Fuente: S.f. Colección Arnoldo Struve. Fotografía 2.: Entrega de camiones para la Asociación Civil durante el cierre de la negociación. Fuente: S.f. Colección Arnoldo Struve 4. LA NEGOCIACIÓN CON SHELL: ENTRE EL PODER Y LA DIGNIDAD La negociación fue compleja. Shell, como corporación transnacional, tenía el poder económico y técnico. Pero Struve logró imponer condiciones humanas. Según su testimonio: “Esta - ban dispuestos a cumplir con todas las peticiones, la única condición que pu - sieron era que el trato fuera cambio de casa por casa”. Esta exigencia simbolizaba digni - dad: no se trataba de dar casas nuevas, sino de respetar el valor simbólico del hogar. La Fotografía 2 muestra la en - trega de camiones a la Asociación Ci - vil, un gesto que reforzó la legitimidad de Struve ante la comunidad. El propio Struve confrmó el eje de la negociación: “Estaban dispuestos a cumplir con todas las peticiones, la única condición que pusieron era que el tra - to fuera cambio de casa por casa”. Sin embargo, la comunidad percibía el inter - cambio desde una lógica distinta, donde el valor sentimental superaba cualquier
106 Opción. Año 41 N° 106 (enero-abril 2025): 99-112 ISSN 1012-1587 / ISSNe: 2477-9385 Naida Arrieta Ríos* compensación material, como lo expresa María del Rosario Estrada: “Entonces nos ofrecieron una plata ahí de las casas, bueno, por las casas no sería, sería por el despojo, porque esas casas no valían nada, esos palos en el agua no valían nada y valían mucho, porque ahí era que vivíamos todos...”. 5. EL LEGADO SIMBÓLICO: DE LÍDER A “CACIQUE” Hoy, Struve es recordado como el “cacique” de Pueblo Viejo. Este término, aunque colonial, ha sido resignifcado como un símbolo de protección y sabiduría. No se le ve como un colaborador de la empresa, sino como un defensor del pueblo. El legado de Struve no está exento de tensiones. Rodulfo Estrada (2010), va - sallo de San Benito y testigo del traslado, refexiona: “Aquí en Mene Grande todo es diferente. Las casas son mejores, sí, pero ya no hay agua. El santo antes iba en bote, ahora va en una grúa. Struve nos sacó de allí, pero también nos sacó del río. A veces me pregunto si valió la pena”. Este testimonio revela la paradoja del progreso: el líder que salva también es el que rompe con lo sagrado. Su fgura persiste en la memoria colectiva, en las fotografías, en los relatos. Aunque no dejó descendencia política directa, su ejemplo sigue inspirando nue - vas generaciones de líderes comunitarios. La comunidad de Mene Grande fue quien lo apodó “cacique”, en reconoci - miento a “su proceder como jefe superior de los ‘indios’ de Pueblo Viejo”. Sin embargo, la percepción de su legado es agridulce. La nostalgia por el mundo per - dido coexiste con el reconocimiento del progreso material. Esta dualidad queda perfectamente encapsulada en la refexión de María del Rosario Estrada: “ ¡Aquí vivimos tranquilos, pero en Pueblo Viejo eranos felices…!”. 6. DISCUSIÓN El caso de Arnoldo Struve muestra que el cambio social no siempre proviene de arriba, sino de fguras que emergen en momentos de crisis. Su autoridad ca - rismática no se basó en el cargo, sino en la convicción personal, la empatía y la capacidad de negociación. La fgura 1 ilustra las complejas dinámicas entre los habitantes de Pueblo Vie - jo, la compañía petrolera (Shell) y Arnoldo Struve. Este gráfco resalta cómo Struve fue visto desde múltiples ángulos y cómo funcionó como un punto cen - tral de negociación. Percepción de Struve por la Comunidad: La comunidad tenía una vi - sión mixta de Struve, que combinaba admiración con cierta dosis de es - cepticismo. Lo veían como “el maestro,” su “líder,” y con el tiempo, como
107 Opción. Año 41 N° 106 (enero-abril 2025): 99-112 ISSN 1012-1587 / ISSNe: 2477-9385 De la crisis petrolera a la emergencia del liderazgo carismático: Arnoldo Struve y la reconfguración... Figura 1. Diagrama de percepciones y relaciones de poder Fuente: Arrieta Ríos (2025).
108 Opción. Año 41 N° 106 (enero-abril 2025): 99-112 ISSN 1012-1587 / ISSNe: 2477-9385 Naida Arrieta Ríos* el “cacique,” un término que se reconfguró para simbolizar protección y sabiduría. Esta percepción positiva se respalda con el testimonio de su hermano, Félix Struve, quien recordó que Arnoldo “reunió a la gente, habló con Shell, y logró que nos dieran casas nuevas”. Sin embargo, el diagrama también muestra percepciones negativas, como la de “corrup - to” u “oportunista”. Esta dualidad refeja los sentimientos encontrados de la comunidad, ya que, aunque obtuvieron mejoras materiales, algunos, como Rodulfo Estrada, lamentaban la pérdida de su conexión con el río y su estilo de vida ancestral. Percepción de Struve por Shell: La compañía petrolera veía a Struve como un “interlocutor válido” y un “líder de la comunidad”. Para Shell, los habitantes de Pueblo Viejo eran una “población a reubicar” o “un pro - blema a resolver,” y Struve representaba la forma de gestionar esta situa - ción. Su validez como negociador se evidencia en el hecho de que la com - pañía estuvo dispuesta a cumplir con su exigencia central de “cambio de casa por casa,” una condición que simbolizaba dignidad para el pueblo. La “Cronología del proceso de cambio” es un diagrama que traza los eventos clave de la reubicación en un contexto histórico más amplio. Muestra que la transformación social no fue un evento único, sino un proceso largo y multifa - cético con varias etapas. Período de reclamos y lucha (1956-1965): La cronología comienza con este período, lo que indica que los problemas de la comunidad no se originaron en 1966. Durante este tiempo, la gente, liderada por Struve, empezó a hacer reclamos a la compañía petrolera. Esto concuerda con la descripción del artículo sobre una crisis prolongada, en la que el suelo se estaba hundiendo y el agua se contaminaba. Eventos de reubicación (1966-1967): La línea de tiempo detalla los eventos específcos del traslado, como el derrame masivo de petróleo en abril de 1965 y el traslado de las primeras 75 familias en febrero de 1966. Esta sección es fundamental porque proporciona el contexto para el “ultimátum” de Struve. Cuando la comunidad se paralizó y no lograba ponerse de acuerdo, él amenazó con abandonar la junta. Este acto deci - sivo, considerado un acontecimiento clave en la cronología, obligó a la comunidad a tomar una decisión colectiva. La línea de tiempo también revela que la reubicación fue un proceso dividido, con reportes de prensa sobre la fragmentación de la comunidad en noviembre de 1966 y la reu - bicación del grupo restante un año después.
109 Opción. Año 41 N° 106 (enero-abril 2025): 99-112 ISSN 1012-1587 / ISSNe: 2477-9385 De la crisis petrolera a la emergencia del liderazgo carismático: Arnoldo Struve y la reconfguración... Figura 2: Cronología del proceso de cambio Fuente: Arrieta Ríos (2025).
110 Opción. Año 41 N° 106 (enero-abril 2025): 99-112 ISSN 1012-1587 / ISSNe: 2477-9385 Naida Arrieta Ríos* Reconfguración comunitaria (años 80): La cronología se extiende has - ta la década de 1980, lo que demuestra que los cambios sociales y cultura - les continuaron mucho después del traslado físico. Aquí, los testimonios de Rodulfo Estrada y María del Rosario Estrada son particularmente re - levantes. Sus refexiones capturan la realidad agridulce de la transforma - ción: aunque obtuvieron progreso material, perdieron su forma de vida tradicional y la felicidad que sentían en Pueblo Viejo. El conficto por la construcción de la iglesia de San Benito en Mene Grande, mencionado en la cronología, es un ejemplo concreto de esta “reconfguración” y las tensiones que surgieron al adaptar viejas tradiciones a un nuevo entorno. Comparado con otros líderes carismáticos en América Latina —como Ken Saro-Wiwa en Nigeria o líderes indígenas en Ecuador—, Struve se distingue por su enfoque no confrontacional. No buscó la confrontación con Shell, sino la negociación estratégica, lo que le permitió obtener re - sultados concretos sin sacrifcar la integridad comunitaria. Además, su fgura ilustra cómo el carisma puede institucionalizarse simbóli - camente, incluso sin dejar estructuras formales. El culto a San Benito, ahora en Mene Grande, conserva elementos de la tradición, pero también incorpora el legado de Struve como mediador entre lo sagrado y lo profano. Cuadro 1: Ruptura espacial y cultural en la reubicación Característica Pueblo Viejo (El Pasado Idealizado) Mene Grande (La Modernidad Impuesta) Vivienda Palaftos de madera, “casas lindas y grandes”, espacio abierto y comunitario. “Casas de ladrillo y cemento”, espacio reducido para la familia nuclear, sensación de “encierro”. Entorno El lago como centro de vida: “frescura”, “abundancia”, “libertad”. Tierra adentro: “calor”, “calles asfaltadas”, sin acceso directo al agua. Alimentación Basada en la pesca y recolección: “El pescado lo agarrábamos ahí mismito”, “pura curma y pescadito”. Basada en el mercado y el comisariato: “Aquí la carne y el queso”, productos procesados. Sensación Felicidad: “¡ Aquí vivimos tranquilos, pero en Pueblo Viejo eranos felices…!”. Tranquilidad/Progreso: “Oportunidad de estudio”, “comodidad”, “seguridad”. Identidad “Nosotros mismos”: Un sentido de comunidad cohesionada y autónoma antes de la crisis. “Los indios”, “los hediondo a pescao”: Identidad marcada por la discriminación inicial y la necesidad de adaptarse. Fuente: Arrieta Ríos (2025).
111 Opción. Año 41 N° 106 (enero-abril 2025): 99-112 ISSN 1012-1587 / ISSNe: 2477-9385 De la crisis petrolera a la emergencia del liderazgo carismático: Arnoldo Struve y la reconfguración... CONCLUSIONES El análisis del caso de Arnoldo Struve revela que el liderazgo carismático no es un fenómeno aislado, sino un producto de la interacción entre crisis, estructura so - cial y acción individual. Struve emergió como una fgura central no por su posición institucional, sino por su capacidad para articular el sufrimiento colectivo con una visión de futuro. Su autoridad, de naturaleza weberiana, se basó en una convicción personal que generó consenso en un contexto de desesperanza. La comunidad de Pueblo Viejo no se reubicó por imposición corporativa, sino por una decisión co - lectiva que fue posible gracias a la mediación simbólica de Struve. Este estudio demuestra que el carisma no es solo una cualidad personal, sino una relación social que se construye en momentos de ruptura. Struve no solo negoció con Shell, sino que reconfguró las representaciones colectivas del pro - greso, el territorio y la identidad. Transformó el miedo al hundimiento en una esperanza de modernización digna. Su famoso ultimátum no fue un acto de au - toritarismo, sino una estrategia dramática para forzar una toma de decisiones en un grupo paralizado por la incertidumbre. Además, el caso ilustra cómo el carisma puede dejar un legado simbólico que trasciende la fgura del líder. Hoy, Struve es recordado como el “cacique” de Pue - blo Viejo, un título que ha sido resignifcado como un símbolo de protección y sabiduría. Este legado persiste en la memoria oral, en las fotografías y en las prác - ticas rituales, como el culto a San Benito, que ahora se celebra en Mene Grande, pero conserva elementos de la tradición acuática. En términos teóricos, este artículo confrma la utilidad del enfoque de Geertz sobre las estructuras de la personalidad, al mostrar cómo un individuo puede catalizar el cambio cultural al encarnar valores contradictorios: lo tradicional y lo moderno, lo local y lo externo. También valida el paradigma procesual de Swartz, Turner y Tuden, al demostrar que el poder no es estático, sino que se negocia en procesos dinámicos de toma de decisiones. En conclusión, el estudio de Struve invita a repensar el papel de las fguras indi - viduales en procesos de modernización forzada, especialmente en contextos petro - leros. No se trata de glorifcar al líder, sino de comprender cómo, en momentos de crisis, una convicción personal puede cambiar el destino de un pueblo. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS Amodio, E. (1993b). Formas de la alteridad: Construcción y difusión de la imagen del indio ame - ricano en Europa durante el primer siglo de la conquista. Ediciones ABYA-YALA.
112 Opción. Año 41 N° 106 (enero-abril 2025): 99-112 ISSN 1012-1587 / ISSNe: 2477-9385 Naida Arrieta Ríos* Ascencio, M. (1976). ¿San Benito, sociedad secreta? Universidad Central de Vene - zuela. Augé, M. (2000). Los no lugares. Espacios del anonimato. Antropología sobre la mo - dernidad. Gedisa. Cassirer, E. (1985). La flosofía de las formas simbólicas. El lenguaje [Traducción del alemán por Armando Morones]. Fondo de Cultura Económica. Castells, M. (2000). La era de la información. Economía, sociedad y cultura. Vol. La sociedad red. Siglo XXI Editores. García Gavidia, N. (1987). Posesión y ambivalencia en el culto a María Lionza. Ediluz. Martínez, A. R. (1976). Cronología del petróleo venezolano. Ediciones Petroleras Foninves. Pollak-Eltz, A. (1991). La negritud en Venezuela. Cuadernos Lagoven. Ricoeur, P. (2003). El conficto de las interpretaciones. Ensayos de hermenéutica. Fon - do de Cultura Económica. Valverdú, J. (2014). Antropología simbólica: Teoría y etnografía sobre religión, simbo - lismo y ritual. Editorial UOC. Velasco, H., & Díaz de Rada, Á. (1997). La lógica de la investigación etnográfca. Un modelo de trabajo para etnógrafos de la escuela. Editorial Trotta HEMEROGRÁFICAS Alguindigue, I. (6 de junio de 1966). Santa Rita, el más foreciente campo petrolero de Falcón, es hoy un potrero olvidado. El Nacional, p. 14. Panorama. (23 de abril de 1965). [Artículo no especifcado]. Panorama. (18 de noviembre de 1966). [Artículo no especifcado].