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E. Gutiérrez-Gómez, R. Auccatoma-Tinco, S. Quispe-Oncebay y K. Olarte-Dávalos
La dimensión política en la preservación de lo sagrado en los rituales andinos
del Ministerio de Justicia. También se apoya en testimonios de campesinos, 
pequeños comerciantes, docentes y jóvenes de secundaria que vivieron esta 
experiencia en cerca de diez comunidades de las provincias de Ayacucho, 
incluyendo Cangallo, Vilcashuamán, Sucre, Huancasancos, Huanta y La 
Mar (Degregori, 1991).
El  Pagapu,  que  signica  “ofrenda”  en  quechua,  es  un  ritual  ancestral 
dedicado al Apu Razuhuillca, celebrado el 24 de junio en el Día del 
Campesino. Según Ávalo, Yagüe y Cangahuala (2016), este evento reeja, 
por un lado, la profunda fragmentación de las propiedades que se remonta 
a  la  época  colonial,  lo  que  ha  dicultado  que  los  campesinos  alcancen 
rendimientos competitivos a gran escala. Las ofrendas, o «pagos», son 
prácticas comunes en las zonas andinas del Perú y funcionan como una 
protección política de sentido místico, especialmente en las montañas 
cubiertas de nieve.
La provincia de Huanta se encuentra en la Región de Ayacucho, 
Perú, a una altitud de 2,627 metros. A lo largo de su historia, Huanta 
ha  desempeñado  un  papel  signicativo  en  el  contexto  social  peruano, 
especialmente en su lucha por la gratuidad de la educación. Este 
movimiento surgió como respuesta a la derogación del Decreto Supremo 
006 de 1969, emitido durante el gobierno militar de Juan Velasco Alvarado, 
lo cual fue considerado un hecho lamentable. En esta lucha, los estudiantes 
de secundaria, los campesinos y la población en general jugaron un papel 
activo (Gutiérrez, 2019). Por otro lado, es importante mencionar que la 
guerra interna en Perú, protagonizada por Sendero Luminoso y las Fuerzas 
Armadas, tuvo un impacto devastador en la región de Ayacucho y, en 
particular, en la provincia de Huanta. 
Los habitantes de la provincia de Huanta y los campesinos de los 
alrededores del Apu Razuhuillca enfrentan constantemente los embates de 
narcoterroristas en la zona limítrofe del Valle de los Ríos Apurímac, Ene y 
Mantaro (VRAEM). Esta situación ha llevado a que los campesinos eviten 
visitar el Apu en caravana. Además, un aporte relevante a la investigación es 
la proyección de películas que evocan el conicto armado; por ejemplo, en 
mayo de 2024 se estrenó «Killapa Wawan», una película completamente 
rodada en quechua.
El objetivo de esta investigación es analizar el efecto positivo del 
Pagapu al Apu Razuhuillca, venerado por los campesinos que le mantienen 
devoción y fe hasta la actualidad. En la sierra peruana y en otras partes 
del mundo, existe la creencia de que los cerros más altos, como los de los 
Andes, están imbuidos de efectos sobrenaturales. Además, en el contexto 
andino, el campesino peruano ha sido históricamente considerado un 
«ciudadano indio». Como señala Eguren (2015), el cambio de «indio» a 
«campesino» implica una transformación en la percepción, pasando de ser 
visto como un objeto a ser reconocido como un sujeto, lo que representa el