
688
Liudmyla Holovii, Svitlana Repetiy, Serhii Ryk, Svitlana Lysenko, Mykola Ryk y Olena Nemyrivska
Formación de una perspectiva de identidad y conciencia como base cívica de la nación
Formar una cosmovisión de identidad nacional y conciencia histórica, 
en cada persona, es un problema urgente y práctico que juega un papel 
importante para el individuo, el Estado y la historia, por lo que la educación 
nos enseña cómo adaptarnos debido a los complejos heredados de nuestros 
padres. 
La historia, el pasado histórico único, la tecnología educativa en la 
escuela, que tiene como objetivo amar a la comunidad de la que se es parte 
fundamental: familiares, distrito, padres e idioma, deviene en patriotismo 
no chovinista, como factor en la consolidación social que revela los intentos 
humanos de absorber todos los valores diferenciales de la cosmovisión; tales 
como: el amor por la tierra natal, la gente, la asimilación de sus prácticas, 
discursos y representaciones. 
Por las razones aludidas, la pedagogía es un privilegio humano, basado 
en la combinación de una multiplicidad de saberes, que se conjugan para 
el logro de la estabilidad y la consolidación social, para lo cual, debemos 
desarrollar signicativamente la capacidad cerebral, llenándola de la mayor 
cantidad de información valida, que se traduzca en habilidades y destrezas 
para la vida cotidiana, en benecio del capital social en general.  
Todo  indica  que,  la  identidad  nacional  en  su  dimensión  material  y 
simbólica se ha moldeado dialécticamente a lo largo de miles de años, 
perfeccionando las facetas de los factores objetivos y subjetivas que 
contribuyen al crecimiento personal y a la cohesión social que actúan, a su 
vez, como un diamante pulido, moldeado a lo largo de generaciones. Por su 
parte, la conciencia histórica es un acelerador de la inteligencia nacional 
extremadamente importante, que heredamos de nuestros padres, formado 
por escuelas, universidades y trabajo en la industria. No es sorprendente 
que, en los países desarrollados avanzados, la educación sea un gasto 
importante porque da forma a la identidad. 
Casi todos los despegues de la civilización humana se deben, en buena 
medida, a la capacidad de una sociedad determinada para valorar y fomentar 
su ciencia, sus descubrimientos, su nación, las habilidades de su gente, lo 
que resulta en el desarrollo de la escritura, el arte, el amor por su tierra, el 
fervor multiplicador, la voluntad legitima de defender la independencia de 
la nación. En este orden de ideas, la comprensión de la identidad nacional 
está determinada, en este caso, por el orden social de la nación ucraniana en 
la preminencia de la educación, cuya esencia se concreta en el «Programa 
Nacional Estatal «Educación» (Ucrania, siglo XXI).
Mas especícamente, el objetivo del ensayo consiste en conceptualizar 
nuevas reexiones cientícas sobre la formación de la identidad nacional, 
como factor de consolidación de la nación mediante la promoción de la 
historia de la tierra nativa, estableciendo las posibilidades de la experiencia 
de aprendizaje signicativo a través del contexto del espacio educativo, que 
conjuga un conjunto de herramientas didácticas y pedagógicas.