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CUESTIONES POLÍTICAS 
Vol. 40 Nº 74 (2022): 607-630
en Ucrania, por Voronoy, quien demostró que era posible sustituir órganos 
(Incortrd, s/f). 
Los avances en materia de trasplantes alcanzaron su clímax luego de 
la Segunda  Guerra  Mundial.  El  24  de  diciembre  de  1952,  en el  Hospital 
Necker de París, tuvo lugar el primer trasplante de riñón entre familiares 
consanguíneos; el 23 de diciembre de 1954, en el hospital Peter Bent- 12 
-  Brighan  de  Boston,    los  doctores  Murray,  Merrill  y  Harrison  lograron 
el primer trasplante renal con éxito total al trasplantar a un paciente, un 
riñón procedente de su gemelo idéntico, sin que hubiera rechazo. En 1958, 
también en Boston, se realizó por primera vez un trasplante, utilizando 
medicamentos inmunosupresores, lo que evitó el rechazo; en 1959 se hizo el 
primer trasplante exitoso de riñón entre gemelos fraternos (Incortrd, s/f). 
En la década de los sesenta continuaron los progresos. En 1960 se 
trasplantó con éxito un hígado entre hermanos, no gemelos; en 1962 se 
trasplantó por vez primera, y con satisfacción, un riñón de cadáver; en 
marzo de 1963, en Denver, Colorado, el Dr. Thomas Starlz hizo el primer 
trasplante hepático; luego, en 1967, también en Colorado, tuvo lugar el 
primer trasplante con supervivencia prolongada a una niña de un año y 
medio de edad. En 1963, en Jackson, Mississippi, D. Hardy hizo el primer 
trasplante clínico de pulmón;  en diciembre de 1966, en la Universidad de 
Minnesota, se hizo el primer trasplante de páncreas de la historia. Más 
tarde,  Lillehei y Kelly trasplantaron un riñón y un páncreas, a una paciente 
diabética en diálisis, consiguiendo función de ambos órganos. (Rachen, 
2021; Portillo, 2019; Brena, 2002; PM, s/f).
Los trasplantes de otros órganos no se hicieron esperar. En 1967, en 
Ciudad del Cabo, Sudáfrica, Cristian Barnard hizo el primer trasplante 
cardíaco. En 1968,  se llevó a cabo el primer trasplante de médula ósea y, en 
1971, el de ovarios; más tarde, en 1977, el de testículos. En el presente siglo, 
el de útero hasta llegar a los trasplantes de rostro (Rachen, 2021; Portillo, 
2019; Brena, 2002; PM, s/f).
América Latina se incorporó a esos adelantos terapéuticos en 1957, 
cuando se realizó el primer trasplante renal en Argentina. Seguirían México, 
en 1963; Brasil, en 1964; Perú y Colombia, en 1966. Para 1968 se hicieron 
trasplantes de corazón en Chile, Brasil, Argentina y Venezuela; de hígado, 
páncreas e intestino en Brasil. En la actualidad, en casi todos los países de 
la región se hacen trasplantes de riñón, hígado, páncreas, pulmón e incluso 
de corazón. El de intestino ha sido practicado en Brasil, Argentina y México 
(Duro, 2004).
La obtención de órganos y tejidos y su posterior inserción o injerto en 
una persona implica aspectos logísticos, jurídicos y políticos. En lo logístico 
el sistema sanitario ha de cumplir con protocolos médicos, que incluyan 
técnicas quirúrgicas y clasicación de tejidos, seguimiento y tratamiento post